Expansión C. Valenciana - Start up
‘Start up’ que caen después de triunfar en la pandemia
Algunas ‘start up’ vivieron su apogeo gracias al contexto específico provocado por el Covid-19. Pero una vez que las circunstancias han cambiado, no han sido capaces de reinventarse para prolongar ese crecimiento meteórico.
Jesús de las Casas. Madrid
Entre marzo y junio de 2020, millones de personas se comunicaban por videollamada a través de Zoom y hacían ejercicio en casa gracias a las bicicletas estáticas de Peloton. Ambas compañías, que pasaron de ser semidesconocidas a contar con valoraciones y facturación disparadas por encima de cualquier previsión, han visto cómo sus cotizaciones se han hundido a niveles que no tocaba desde antes de la pandemia. Zoom se ha desplomado un 86% desde que alcanzó máximos de octubre de 2020, mientras que Peloton ha caído más de un 90% desde su pico de enero de 2021.
La forma en la que el Covid-19 trastocó la vida de las personas dio paso a un escenario idóneo para estas start up. Sus modelos de negocio encajaban a la perfección con el estilo de vida digital impuesto por los confinamientos, con la tecnología como aliado que permitió que el trabajo, el estudio e incluso el ocio se desarrollasen desde el hogar. Aquellos cambios parecían haber llegado para quedarse pero, dos años y medio después, el tiempo ha demostrado que la mayoría de las personas ansiaba recuperar la normalidad en muchas facetas.
Viejos hábitos
Del mismo modo que actividades como el turismo, el comercio físico y los eventos se vienen recuperando más rápido de lo esperado, el contexto
específico que se produjo durante la pandemia hizo que las expectativas en torno a algunas empresas se distorsionasen. “Muchas de las previsiones que se hicieron no han terminado de corresponderse con la realidad: la proyección a futuro del teletrabajo y el comercio electrónico se sobrevaloró a raíz del Covid-19. Una vez que ha vuelto la normalidad,
es lógico que caigan las valoraciones”, apunta Carlos Blanco, fundador de Encomenda Smart Capital y Nuclio Digital School.
Pablo Ventura, socio de K Fund, explica lo sucedido a partir de dos grandes factores: “Son correcciones normales que nos devuelven a un escenario parecido al de 2019, como resultado de la caída general en las
bolsas debido a la incertidumbre global y de la caída del sector tech como corrección lógica tras un ciclo largo de crecimiento donde se alcanzaron múltiplos exageradamente altos, en parte provocados por el Covid-19”. En este sentido, la lectura puede ser incluso positiva para el sector, que se aleja así de una hipotética burbuja.
Como destaca Ventura, “una gran parte de las empresas que ahora están corrigiendo fuertemente se vieron muy beneficiadas hace dos años”.
Las perspectivas que afrontan ahora estas compañías son inciertas. “Deben asumir que el contexto ha cambiado y tendrán que reajustar sus previsiones, igual que las mejoraron cuando atravesaban un buen momento gracias a la pandemia”, advierte Blanco. Aunque algunas start up fueron capaces de reinventarse durante la pandemia y ahora disponen de una doble ventaja, estas empresas tienen grandes estructuras que dificultan su capacidad para transformarse.
Los inversores se muestran reticentes ante este perfil de compañías, que cuentan con un gran potencial para triunfar en un contexto determinado pero que pueden sufrir si las circunstancias cambian.
Pablo Ventura señala que “no solemos estar muy interesados en estos modelos: sólo nos planteamos una inversión cuando creemos que algo ha llegado para quedarse”. Por su parte Carlos Blanco también se decanta “por compañías a las que no les afecten tanto los ciclos”.
Desde la pandemia hasta la invasión rusa de Ucrania, pasando por la inflación y la crisis energética y de materiales, el fundador de Encomenda y Nuclio subraya que “nunca habíamos tenido un contexto de tantos cambios y situaciones macroeconómicas en tan poco tiempo como ahora”.