La sueca Einride capta 500 millones

La start up sueca Einride tiene un plan revolucionario para el futuro de los vehículos industriales pesados: camiones eléctricos sin conductor. La compañía acaba de cerrar una operación de financiación de 500 millones de dólares, con una parte de equity de 200 millones –en la que han participado fondos como Northzone, EQT Ventures, Temasek, el fondo de pensiones sueco AMF, Polar Structure y Norrsken VC– y un tramo de deuda de 300 millones liderada por Barclays Europe. El objetivo es reforzar su flota de vehículos para expandirse a nuevos mercados, en Europa y Norteamérica.

Fundada en Estocolmo en 2016, Einride desarrolló inicialmente un camión de carga autoconducido que también puede ser controlado en remoto por operadores humanos. Denominados como “cápsulas” por su peculiar forma sin cabina, ya han funcionado con éxito en diversas pruebas. Sin embargo, las trabas regulatorias han llevado a la start up a adoptar un enfoque a medio camino, con camiones eléctricos conducidos por personas. Estos vehículos ya son usados por compañías del sector del transporte en Suecia y en EEUU.

En los últimos meses, la compañía ha acelerado su expansión desde su lanzamiento en Alemania en septiembre. La semana pasada hizo lo propio en Bélgica, Países Bajos y Luxemburgo, y ya planea su desembarco en Noruega.

Einride trabaja con grandes firmas como Electrolux y GE Appliances. Esta última desarrolla un piloto en Estados Unidos para desplegar cápsulas autónomas. Estos proyectos requieren inversiones intensivas de capital, teniendo en cuenta los costes ligados al desarrollo de cientos de camiones y su software asociado.