Un golpe para el ecommerce
La canadiense Shopify, centrada en ofrecer herramientas a los comercios que quieren vender online, ya crecía antes de la pandemia pero en 2020 pisó el acelerador. La compañía, que había salido a Bolsa en 2015 con una valoración de 1.270 millones de dólares, se vio aupada por el crecimiento exponencial del comercio electrónico al calor del Covid-19. En septiembre de 2020 su capitalización se situaba por encima de los 100.000 millones, siendo capaz de multiplicar por ocho sus ingresos y su beneficio bruto en apenas cuatro años. No obstante, Shopify se encuentra hoy casi de vuelta en el punto de partida: ha perdido todo lo ganado en Bolsa desde octubre de 2019, con caídas que se han intensificado durante este año, llegando a perder más de tres cuartas partes de su valor. Si en el segundo trimestre de 2021 había conseguido ganar 879 millones de dólares, en el mismo periodo de este año ha registrado pérdidas netas de más de 1.200 millones de dólares.
Su CEO, Tobias Lütke, ha reconocido que se equivocó prediciendo un salto exponencial en la adopción del ecommerce, un error que llevó a la compañía a anunciar en julio el despido del 10% de su plantilla.