Expansión País Vasco - Start up
Emprendedores que conectan con la energía del futuro
Las propuestas que ayudan a ahorrar en la factura de la luz, las que aprovechan las fuentes renovables y aquellas que posibilitan redes más inteligentes son los grandes ejes impulsores de la transformación del sector energético.
La energía se encuentra en un momento convulso. A los precios de la luz, en subida continua desde 2021, se suma ahora la propuesta de la Comisión Europea de imponer un impuesto a los beneficios de las grandes energéticas para controlar el coste. Además, Bruselas quiere dar un nuevo impulso a las fuentes renovables y ha marcado el objetivo de aumentar el porcentaje de estas energías en el consumo final hasta el 45% en 2030, una decisión respaldada por los eurodiputados en el Parlamento hace unos días. Se trata de que el futuro mercado energético en Europa sea más limpio, eficiente, esté menos carbonizado y tenga unos precios más justos.
En España la apuesta por las renovables viene de lejos. Las buenas condiciones de viento y sol en nuestro país han hecho de él un lugar propicio para impulsar proyectos eólicos y solares que aprovechen estas fuentes, tanto por parte de las energéticas españolas como por grupos extranjeros que han visto aquí un interesante mercado para invertir.
A esto se añade que los consumidores han ido viendo, poco a poco, las ventajas de consumir energía solar a través de la instalación de paneles en sus azoteas y tejados. Comprueban que consumiendo estas fuentes su factura mensual es más barata al beneficiarse de tarifas flexibles y adaptadas a cada hogar y familia. A la vez, toman conciencia de los beneficios para el medio ambiente al reducirse las emisiones de CO2. Las oportunidades de la energía solar han favorecido el nacimiento de nuevos proyectos y compañías que utilizan tecnología de última generación para ofrecer fuentes limpias a empresas y particulares.
En 2010 se lanzaba Holaluz, firma que vino a revolucionar la forma de consumir energía. Su propuesta consiste en la instalación de paneles solares en lo alto de casas y edificios, con los que el consumidor paga un precio fijo por lo que gasta y consigue un ahorro medio del 10% cada mes. La contratación del servicio es fácil, completamente online y la energía es 100% verde.
A este proyecto le siguieron otras propuestas similares, con comercializadoras de energía renovable como
Lucera: el cliente paga el precio de coste de la energía más una cuota de 4,90 euros al mes más impuestos. Se contrata de forma online y no implica permanencia. El cliente dispone de una app para entender su factura y su consumo y desde las que ofrecen consejos sobre los electrodomésticos para que consuman menos.
Bamboo Energy nació en 2020 y ofrece una plataforma basada en una tecnología de inteligencia artificial que permite a distribuidoras energéticas y consumidores intercambiar energía procedente de fuentes renovables. Con esta propuesta el cliente final es, a la vez, consumidor y productor y elige el momento de vender la energía que le sobra. La compañía es una spin off del Instituto de Investigación en Energía de Catalunya) y surgió tras siete años de trabajos de investigación.
Aldea Energy es una de las últimas start up que ha llegado al negocio de las energías limpias. Lanzada en Valencia, presenta una propuesta de autoconsumo colectivo: a través de la instalación de paneles solares en las cubiertas de tejados se generará energía para particulares o empresas que estén en un radio de 500 metros y próximamente se extenderá hasta los 2 kilómetros. El usuario no tiene que realizar ninguna inversión, únicamente hacer una suscripción mensual que se ofrece a través de Aldea Energy. La compañía promete ahorros de hasta el 40% en la factura.
A estos esfuerzos por impulsar un mayor consumo de energías limpias se suma otro gran reto: hacer más sostenibles e inteligentes las redes de distribución. Distintas tecnologías, como sensores o la inteligencia artificial, permiten que la distribución de energía al usuario final no sufra incidentes o caídas por sobrecarga en la red. En el futuro las redes tendrán que cubrir mayores demandas procedentes no sólo del consumo de hogares y empresas, sino también de usos cada vez más crecientes como la carga de coches eléctricos. David Purón, cofundador de Barbara IoT, recuerda que “no se han hecho inversiones en las infraestructuras energéticas desde hace décadas. Esto provoca que, en ocasiones, haya picos de demanda que no se pueden cubrir”. La tecnología permite controlar y distribuir mejor
la energía y promover, por ejemplo, su almacenamiento para hacer uso de ella en los momentos de alta demanda.
Las grandes energéticas han visto en las tecnologías desarrolladas por las start up una manera de impulsar su negocio con una apuesta decidida por las energías renovables y por unas redes eléctricas más eficientes. El programa de aceleración Perseo de Iberdrola lleva quince años apoyando e invirtiendo en start up que la energética considera claves para crecer en distintas áreas. Cuenta con nueve firmas en su cartera de inversión, entre las que se encuentra el unicornio Wallbox, empresa de soluciones de recarga para vehículos eléctricos, que cotiza en Wall Street. Firmas de eficiencia energética, de soluciones basadas en inteligencia artificial aplicadas a este sector, de baterías de almacenamiento y de recarga de coche eléctrico configuran los focos de interés para Iberdrola.
En EDP llevan desde 2017 apoyando proyectos que ayuden a crecer a la compañía, dentro del llamado modelo de innovación abierta, que fomenta alianzas entre grandes compañías y firmas emergentes. “Se analizan unas 500 start up cada año y de ellas se seleccionan entre 10 y 15 para que realicen proyectos piloto dentro de las instalaciones de EDP. De esta manera, pueden probar sus tecnologías en una gran empresa”, señala Luis Santos, director de innovación de EDP España. Soluciones para energías renovables e hidrógeno verde, para redes más eficientes y las asociadas a la movilidad eléctrica son las grandes áreas de interés de la compañía.