Las piernas primero
Robustas, bien torneadas, suaves sedosas… Todavía estás a tiempo de prepararlas para lucir en verano.
Vuelven los shorts, los vestidos, las faldas cortas… y pronto comenzaremos a buscar el bañador y el biquini para lucir en la playa este verano. Toca cuidarse y trabajar para conseguir unas piernas bonitas.
Lo primero es exfoliar para eliminar células muertas. Conviene hacerlo una vez a la semana con una producto específico y, si no se tiene la piel muy fina, con un guante de crin. También puedes fabricar un exfoliante casero con aceite y azúcar y una crema corporal. El siguiente paso antes de abordar posibles problemas es una depilación eficiente.
Temida celulitis
Piernas hinchadas, varices, estrías, moratones… que quizá antes ni habías visto, aparecen ahora. Una alimentación equilibrada, beber un litro y medio de agua al día y practicar algún ejercicio son el mejor fondo de armario. Sin embargo, a menudo es necesaria ayuda.
Para luchar contra la piel de naranja, son imprescindibles los drenantes y cremas o aparatología que ayuden a deshacer los nódulos de grasa. Para saber qué tratamiento conviene seguir, conviene que un especialista establezca de qué tipo de celulitis se trata: acuosa, debido a la retención de líquidos por mala circulación; adiposa, por una dieta poco sana y la falta de ejercicio, o fibrosa, instalada hace tiempo.
Aunque el agua es buena, no hay que forzarse, ya que si se bebe y no se elimina, las piernas se hincharán más. Si han aparecido pequeñas arañas vasculares, una crema con vitamina K puede ayudar. Y hasta que llegue el verano, un autobronceador disimulará las imperfecciones.