Tristán Ulloa,
Vivió su adolescencia en la Galicia de los ochenta que recrea esta ficción, en la que borda al heroico policía de la Operación Nécora.
el sargento Castro de Fariña, recuerda su adolescencia en Galicia
Es uno de los mejores trabajos de mi carrera”, asegura Tristán Ul loa sobre Fariña, su cuarta ficción con Bambú después de La Embajada, El tiempo entre costuras y Gran Reserva.
¿Cómo llevas el éxito?
De maravilla porque, como gallego, era pesimista sobre que una serie con este tema y estos guiones llegara a emitirse o funcionara. ¡Y qué bien que se vean fuera los grandísimos actores gallegos!
¡Tú viviste la época!
Pasé la adolescencia en Vigo. El contrabando de tabaco, cintas de casete… estaba normalizado. Luego perdí amigos por la droga.
Creo que un comisario real, Enrique León, te inspiró para el papel.
Él es un referente, pero Darío Castro es una metáfora; representa a todos los que lucharon contra el contrabando primero y el narcotráfico después con unas herramientas inútiles. El Estado solo reaccionó cuando dejó de recaudar dinero y las madres contra la droga se pusieron firmes.
¿Cómo lo abordaste?
Trabajé la degeneración emocional, física, y de salud de mi personaje durante los diez años de caza al narco. Empezó jovial y echado p’alante y, a partir del quinto, se ha vuelto descreído y escéptico; idiosincrasia gallega.
¡Sus secuencias con Miñanco son memorables!
Sí, son tensas y generan expectación, en la línea de las de Tommy Lee Jones y Harrison Ford en El fugitivo. Tienen códigos morales parecidos y aprenden a entenderse.
¿Segunda temporada?
Me encantaría. La historia merece más cancha, pero si acaba aquí, dejamos un listón alto.
¿Otros proyectos?
La británica Snatch; soy un alcalde corrupto, el villano de la tem- porada. Y una serie escrita por mi hermano, para aquí o para fuera.
¿Narcosabre puertas?
Sí, aunque mi papel, Ernesto Semper, se corto por temor a represalias. Es lo que tiene abordar la realidad, como en Fariña.
¿Te chocaron las detenciones de Sito y Oubiña?
Nos han dado publicidad, pero hay que ser prudentes y no frivolizar sobre una realidad que sigue afectando a la sociedad gallega.
Y estás en La Catedral…
Interpreto a su primer sacerdote, el padre Albert. La serie hará hincapié en la dureza de la época con la mujer.