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Netflix estrena serie

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La ‘familia’ continúa en activo

Nicolo Rizzuto era un granjero siciliano que llegó a Canadá con unos dólares en el bolsillo en los años cincuenta y en un par de décadas se convirtió en uno de los jefes más reconocido­s de las ‘ familias italianas’ que controlaba­n los bajos fondos del juego y la construcci­ón en la provincia de Quebec. Capo de la Mafia de Montreal, el sindicato de crimen organizado más grande y que sigue opera- tivo, Rizzuto llegó a ser considerad­o el último ‘padrino’ de América.

Una historia real

La serie canadiense Bad Bloods, cuya primera temporada Netflix estrena el viernes 7, está basada en el libro de 2015 Business or Blood: Mafia Boss Vito Rizzuto’s Last War, escrito por Antonio Nicaso y Peter Edwards.

La historia comienza con el establecim­iento del po- der de los Rizzuto en Montreal en los ochenta tras su sangrienta guerra con los Cotroni, que se prolongó hasta 2010. Hoy el jefe es su nieto Leonardo.

Paul Sorvino ( Uno de los nuestros) da vida al “dueño del Ayuntamien- to”, como él mismo se definía, ya que tenía comprados a políticos y funcionari­os a través del soborno o la intimidaci­ón. Anthony La Paglia, conocido por encarnar a Jack Malone en Sin rastro, es su hijo Vito, quien se encargó del control del negocio cuando su padre pasó a un segundo plano.

Muchos les calificaro­n como ‘ la sexta familia’, considerán­dola una más de las cinco que operaban en Nueva York. Cuando Vito fue encarcelad­o en Colorado, fue su hijo Nico (Brett Donahue) quien tomó las riendas a pesar de la intención de Vito de mantenerlo alejado de los negocios familiares, ya que carecía de ‘talento’, se metió con las personas equivocada­s y fue asesinado en 2009. A pesar de las muertes y desaparici­ones, los Rizzuto más cautos, siguen en activo.

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