Firmeza para tu piel
El colágeno, proteína encargada de la juventud cutánea, puesto que le otorga elasticidad y tersura, se va perdiendo con el paso del tiempo. Pero podemos tomar algunas medidas.
Es la proteína más abundante de nuestro cuerpo y se encarga de mantener unidas diferentes estructuras del organismo. Se encuentra en la piel, los huesos, los cartílagos, el pelo y las uñas. Al igual que la elastina, lo producen los fibroblastos, un tipo de célula que disminuye a medida que nos hacemos mayores, generando menos colágeno. Esto ocurre a partir de los 25 años, provocando que se pierda entre 1 y un 1,5 por ciento de colágeno cada año. Además, hay factores como el estrés, la falta de sueño y la contaminación, que pueden acelerar este proceso natural. La consecuencia es que la piel pierde resistencia, firmeza y elasticidad.
Cosméticos con colágeno
El principal problema de las cremas y sueros enriquecidos con colágeno, es la dificultad que tiene la fórmula nativa para penetrar en las capas más profundas de la piel, debido al gran tamaño de sus moléculas. “Aplicado sobre el rostro proporciona una hidratación superficial y tersa la piel durante horas, pero lo interesante sería producir nuevo colágeno, más ligero”, explica la farmacéutica Ana Ordis.
Por eso los cosmetólogos y laboratorios se han centrado en formular sus productos con activos precursores del colágeno, que retrasan su degradación y que impiden la oxidación de las células. Entre ellos se encuentran la centella asiática y el ácido retinoico.