Agenda tiempo libre. Dakota Johnson
Sin miedo al riesgo, la actriz demuestra que es mucho más que hija y nieta de tres grandes nombres de Hollywood.
Comparte su vida con Chris Martin, líder de Coldplay
Convertirse en Anastasia Steele, la inocente protagonista de la trilogía Cincuenta sombras
de Grey, es una de las mejores cosas que le han pasado a Dakota Johnson. Pero quiere pasar página y seguir creciendo como actriz para demostrar que no solo es nieta de Tippi Hedren e hija de Melanie Griffith y Don Johnson. Por eso siempre agradecerá a Luca Guadagnino que la eligiera para coprotagonizar Cegados por el sol y, sobre todo, Suspiria, la versión del clásico de terror de Dario Argento, en la que interpreta a una bailarina con increíble fuerza y determinación, demostrando que no tiene miedo al riesgo.
Una mala estudiante
Nacida en Austin ( Texas) hace 29 años, pero criada entre Aspen y Los Ángeles, pasó su niñez y adolescencia de un rodaje a otro acompañando a su familia. Mala estudiante –la enviaron a un internado católico pero sirvió de poco–, se convirtió en modelo para poder indepen- dizarse. El cine, donde debutó a los 8 años, junto a su hermanastra Stella en Locos por Alabama y a las órdenes de su padrastro Antonio Banderas, llegó de forma natural con pequeños papeles en La red social, Eternamente comprometidas y Need for Speed.
Un explícito monólogo de Persona, de Ingmar Bergman, que recitó en la prueba de casting le valió ser e l e g i d a como Anastasia Steele. A pesar del disgusto de su familia, que no ha visto la trilogía a petición de Dakota, su interpretación es lo único que valoró la crítica. Conocedora de los riesgos de la fama y extremadamente tímida, la actriz, que desde hace un año comparte su vida con el músico Chris Martin, el líder de Coldplay, con quien vive en Malibú, se mantiene alejada de las redes sociales y de los escándalos. En primavera estrenará un drama de Babak Anvari, todavía sin título, con Armie Hammer, y The Peanut Butter Falcon, una hisroria de aventuras junto a Shia LaBeouf.