SuperTele

‘First Dates’.

El amor siempre es caprichoso y en la tele aún más. Pero si Carlos Sobera y sus chicos ya son expertos cupidos, hay parejas que han dejado su sello en el programa.

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Repasamos las parejas que más nos han llamado la atención

Besos, miradas , flechazos… y también decepcione­s. Todo es posible en el restaurant­e más famoso de Cuatro, First Dates. El amor no para de llamar a sus puertas, pero algunas veces triunfa y otras… vuelve a salir, ya que los comensales han decidido separar sus caminos.

Pero durante dos años y medio (se estrenó el 17 de abril de 2016) y casi 800 programas, muchas personas han decidido repetir la cita para comprobar si tienen futuro como pareja o si la cena en el local de Sobera solo fue una ilusión creada por la emoción de las cámaras.

Con alrededor de 4.000 citas celebradas, la audiencia no ha para- do de crecer gracias también a la buena sintonía del equipo. Carlos Sobera es el encargado de recibir a los invitados al restaurant­e y, además de darles la bienvenida, comparte consejos para el amor. Matías Roure, el barman, brinda un cóctel a los recién llegados para calmar los nervios; su novia, Lidia Torrent –se enamoraron en el programa–, Yulia Demoss y las gemelas Cristina y Marisa, hacen que la velada sea perfecta. A lo largo de sus tres ediciones, el programa no ha hecho distincion­es por razón de sexo, edad o religión. Solo existe un objetivo: enamorar y divertir a los invitados y a los espectador­es.

 ??  ?? Sahi y Aurora. “Es la primera vez que tengo una cita con una embarazada”, decía Sahi. Ella llegó al restaurant­e teniendo muy claras sus intencione­s: “No busco un padre para mi hijo, sino una pareja”. Durante la cena hablaron del bebé y de los dos hijos de él. Sahi pidió a Aurora una segunda vez mientras acariciaba su tripita.Cita a cuatro. El restaurant­e también ha visto un póker de citas como el que protagoniz­aron las gemelas Cristina y Laura con Jesús y Antonio. Por un lado, Laura y Antonio conectaron desde el principio y decidieron tener una segunda oportunida­d. Sin embargo, Cristina y Jesús no, porque ella le había confesado que era muy celosa y eso no le gustó.Rubén y Jorge. Reconocier­on que vivieron “su cita perfecta”. Durante la cena charlaron de multitud de temas y, para sorpresa de ambos, coincidían en casi todo. Culminaron la noche en el reservado del local con un beso.
Sahi y Aurora. “Es la primera vez que tengo una cita con una embarazada”, decía Sahi. Ella llegó al restaurant­e teniendo muy claras sus intencione­s: “No busco un padre para mi hijo, sino una pareja”. Durante la cena hablaron del bebé y de los dos hijos de él. Sahi pidió a Aurora una segunda vez mientras acariciaba su tripita.Cita a cuatro. El restaurant­e también ha visto un póker de citas como el que protagoniz­aron las gemelas Cristina y Laura con Jesús y Antonio. Por un lado, Laura y Antonio conectaron desde el principio y decidieron tener una segunda oportunida­d. Sin embargo, Cristina y Jesús no, porque ella le había confesado que era muy celosa y eso no le gustó.Rubén y Jorge. Reconocier­on que vivieron “su cita perfecta”. Durante la cena charlaron de multitud de temas y, para sorpresa de ambos, coincidían en casi todo. Culminaron la noche en el reservado del local con un beso.
 ??  ?? Su pasión por los animales y los videojuego­s fueron las dos razones que propiciaro­n la unión de esta pareja. Tan bien fue la cita que hasta el alicantino dudaba: “Creo que ella es un robot al que le han dado todas las respuestas que me gustan”. Decidieron que su segundo encuentro, ya que a ambos les gustaban tanto los animales, fuera en el zoo.Alejandro y Laura. Sentados en la mesa, Alejandro se quedó mirando fijamente a Laura y le dijo: “Tienes unos ojazos, ¿no llevarás lentillas?”. Y ella contestó: “No, no llevo”. Pero al instante confesó que “me suelen decir que tengo los ojos bonitos y estoy acostumbra­da, pero él me ha sacado los colores”, admitió entre risas. El amor flotaba en el aire.
Su pasión por los animales y los videojuego­s fueron las dos razones que propiciaro­n la unión de esta pareja. Tan bien fue la cita que hasta el alicantino dudaba: “Creo que ella es un robot al que le han dado todas las respuestas que me gustan”. Decidieron que su segundo encuentro, ya que a ambos les gustaban tanto los animales, fuera en el zoo.Alejandro y Laura. Sentados en la mesa, Alejandro se quedó mirando fijamente a Laura y le dijo: “Tienes unos ojazos, ¿no llevarás lentillas?”. Y ella contestó: “No, no llevo”. Pero al instante confesó que “me suelen decir que tengo los ojos bonitos y estoy acostumbra­da, pero él me ha sacado los colores”, admitió entre risas. El amor flotaba en el aire.
 ??  ?? Antonio y Juanita. Para ellos, de 81 años, nunca es tarde para encontrar el amor. El cordobés recibió a su cita bailando, algo que le gustó mucho a ella: “Yo me dejo llevar”. Y tras hablar de los medicament­os que toman, decidieron volver a verse.
Antonio y Juanita. Para ellos, de 81 años, nunca es tarde para encontrar el amor. El cordobés recibió a su cita bailando, algo que le gustó mucho a ella: “Yo me dejo llevar”. Y tras hablar de los medicament­os que toman, decidieron volver a verse.
 ??  ?? Sergio y Deyna. No fue una cita a ciegas, porque ya se conocían. Una relación a distancia les separó tanto que rompieron, y ella pidió ayuda al programa. Él no se imaginaba nada: “Quiero encontrar el amor de mi vida”. Y estaba allí.
Sergio y Deyna. No fue una cita a ciegas, porque ya se conocían. Una relación a distancia les separó tanto que rompieron, y ella pidió ayuda al programa. Él no se imaginaba nada: “Quiero encontrar el amor de mi vida”. Y estaba allí.
 ??  ?? Alejandro y Sonia. Una cita con muchos ingredient­es. Él, exmilitar, despertó el morbo de ella, que afirmó que le gustaban los uniformes. Su mutua pasión por los tatuajes y un baile les llevó a un beso final.
Alejandro y Sonia. Una cita con muchos ingredient­es. Él, exmilitar, despertó el morbo de ella, que afirmó que le gustaban los uniformes. Su mutua pasión por los tatuajes y un baile les llevó a un beso final.
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 ??  ?? Natalia y Violeta. Tras nueve años juntas, la primera decidió llevar a su pareja al restaurant­e para pedirle matrimonio. Carlos Sobera y su equipo las sorprendie­ron con una boda oficiada por Platania, musa del programa.
Natalia y Violeta. Tras nueve años juntas, la primera decidió llevar a su pareja al restaurant­e para pedirle matrimonio. Carlos Sobera y su equipo las sorprendie­ron con una boda oficiada por Platania, musa del programa.
 ??  ?? Manolo y María. La cita entre ambos no empezó bien; la primera vez que se iban a ver, él lo canceló por indisposic­ión: “Comí berenjenas, sandía, yogur y helado el día anterior y me sentó mal”. Cenaron y, a pesar de que Manolo le dijo que aparentaba 79 años en vez de los 74 de su DNI, María le dijo: “Volveremos a quedar e iremos a bailar”.Siqui y Laura. Cuando él confesó que, tras unos años en Sevilla, era del club hispalense, ella no pudo disimular su sorpresa: “Soy presidenta de una peña del Betis”. Él se la ganó diciendo que era “la chica más guapa que había visto en España”, y le escribió a su madre para decirle que había “encontrado al amor de su vida. ¡Deséanos suerte!”
Manolo y María. La cita entre ambos no empezó bien; la primera vez que se iban a ver, él lo canceló por indisposic­ión: “Comí berenjenas, sandía, yogur y helado el día anterior y me sentó mal”. Cenaron y, a pesar de que Manolo le dijo que aparentaba 79 años en vez de los 74 de su DNI, María le dijo: “Volveremos a quedar e iremos a bailar”.Siqui y Laura. Cuando él confesó que, tras unos años en Sevilla, era del club hispalense, ella no pudo disimular su sorpresa: “Soy presidenta de una peña del Betis”. Él se la ganó diciendo que era “la chica más guapa que había visto en España”, y le escribió a su madre para decirle que había “encontrado al amor de su vida. ¡Deséanos suerte!”
 ??  ?? Aurora y Amalia. Nada más llegar, Aurora se quedó cautivada del estilo ‘Lady Gaga’ de Amalia: “Que se parezca a esa cantante me resulta atractivo, y es diferente”. Pero a la aludida no le gustó tanto su compañera: “Las cejas se las pinta muy mal”. La cita se fue al traste cuando Amalia confesó que robaba maquillaje en las tiendas.Manuel y Manuela. Manuel le pidió ayuda al programa para recuperar la confianza de su pareja, Manuela,tras una infidelida­d. El espacio de Cuatro puso a su disposició­n a la coach sentimenta­l Leyla Ramrani para ayudarles, y vaya si lo hizo… al final Manuel fue perdonado, hincó rodilla en tierra y le pidió matrimonio a Manuela, que aceptó con lágrimas en los ojos.
Aurora y Amalia. Nada más llegar, Aurora se quedó cautivada del estilo ‘Lady Gaga’ de Amalia: “Que se parezca a esa cantante me resulta atractivo, y es diferente”. Pero a la aludida no le gustó tanto su compañera: “Las cejas se las pinta muy mal”. La cita se fue al traste cuando Amalia confesó que robaba maquillaje en las tiendas.Manuel y Manuela. Manuel le pidió ayuda al programa para recuperar la confianza de su pareja, Manuela,tras una infidelida­d. El espacio de Cuatro puso a su disposició­n a la coach sentimenta­l Leyla Ramrani para ayudarles, y vaya si lo hizo… al final Manuel fue perdonado, hincó rodilla en tierra y le pidió matrimonio a Manuela, que aceptó con lágrimas en los ojos.
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