María Bouzas y Ramón Ibarra hacen un balance de su trabajo en El secreto de Puente Viejo, tras nueve años
Con pena por concluir su historia de amor, desvelan sus ‘secretos’ como pareja en la popular novela.
Cuando María Bouzas y Ramón Ibarra posaron para esta foto, no sabían que las grabaciones de la serie se interrumpirían debido a la covid-19 ni las dificultades que tendrían para grabar el final de sus personajes. Ambos actores nos cuentan cómo ha sido la aventura de interpretar a Francisca y Raimundo.
¿Qué balance hacéis de la serie? María Bouzas: Han sido nueve años maravillosos; nunca hubiera pensado que estaría tanto tiempo en una diaria. Es un privilegio haber formado parte de esta historia que se ha convertido en un fenómeno.
Ramón Ibarra: Estoy de acuerdo con María, y hemos seguido con la misma entrega desde el principio hasta el final. ¿Cómo recordáis el primer día?
M. B.: Grababa con Enric Benavent (don Pedro) y Mario Martín (don Anselmo) en La Casona. Llevé la escena muy preparada porque hablaba mucho y los guionistas querían presentar bien mi personaje y el lugar. Fue un día especial.
R. I.: Estaba nervioso y feliz. Cuando me llevaron a maquillaje, me quedé maravillado por la calidad artística que había.
¿Y vuestra escena favorita?
M. B.: La primera, cuando ella va a la taberna y lo encuentra solo. Discuten pero desean abrazarse. Raimundo y Francisca han tenido escenas muy hermosas.
R. I.: La vez que le pregunté por qué no quería casarse conmigo y antes de que me respondiera tuve un ictus. Ahí se ve que me ama. ¡Aunque también ha intentado matarme! (risas).
¿Qué habéis aprendido del otro?
M. B.: Empatizamos mucho; es maravilloso trabajar a su lado. Admiro su templanza y su sentido del humor.
R. I.: María es una estudiante muy buena y precisa. Destaco su esfuerzo por transformar a Francisca para alejarla de la típica villana, la impregnó de cosas suyas, dándole sorna. ¿Cómo fue la despedida?
M. B.: Tampoco pudimos hacerla. Y si pienso en cómo habría sido, me emociono porque esta serie está en un rincón de mi corazón. Tantos años dan para querer a tus compañeros. El abrazo de los fans también ha sido importante. Sin ellos jamás habríamos estado tantos años en antena.
R. I.: Imaginaba que lo celebraríamos con un fiestón con todos los actores que han pasado por la serie. Y nos hemos quedado sin la tradición de regalar un jamón al que se iba, que empezó Álex Gadea. ¿Contentos con el final de vuestros personajes?
M. B.: No puedo desvelarlo pero es el que le corresponde. Cuando lo leí dije: “¡pues claro!”. Así que me voy muy feliz.
R.I.: Solo quiero decir que se barajaron varios. A mí me gusta la idea de amor eterno. ¿Es difícil desprenderse de ellos?
M. B.: Me acuerdo mucho de Francisca, pero no soy de las que se lleva el personaje a casa.
R. I.: Más que del papel, me acuerdo de Puente Viejo en general. Un trabajo tan largo no se olvida fácilmente.
“Se barajaron varios finales para nuestros personajes”
(R. Ibarra)
“Hemos tenido escenas muy hermosas juntos”
(M. Bouzas)