Historia de un virtuoso
El violinista libanés, empeñado en popularizar los clásicos, presenta su último disco en directo.
Tenía 3 años cuando su padre, un músico frustrado descendiente de armenios de la diáspora, le puso un violín en las manos. Con 7 Ara Malikian amenizaba con su virtuosismo el rato que pasaba en el refugio antiaéreo durante la guerra civil que asoló Líbano entre 1975 y 1990; y a los 15 ingresó en Hochschule für Musik und Theater Hannover por cortesía del director de orquesta alemán Hans Herbert Jöris.
Comenzaba así la carrera del músico de ecléctico estilo calificado por el gran Rostropóvich como “el mejor violinista de su generación”, empeñado en liberar a la música clásica de su encorsetado envoltorio.
Tras su paso por orquestas de Alemania y Londres, Ara, galardonado con premios tan prestigiosos como el Mendelssohn, el Sarasate, que le abrió las puertas de Europa, y el Paganini, se estableció en España en 1998, donde ha sido concertino en la Orquesta Sinfónica de Madrid; presentó durante cuatro años el programa infantil de La 2 El club de Pizzicato, y popularizó los clásicos con el refrescante espectáculo PaGAGnini, con la compañía Yllana.
Una vida de película
Con más de 40 discos editados y una media de 200 conciertos al año, el músico, nacionalizado español desde 2014 y cuya vida protagonizó el documental Una vida entre las cuerdas,