EL OBJETIVO ES LOGRAR UN ESTADO DE REMISIÓN
En la actualidad, los trastornos autoinmunes
son crónicos y todavía no disponen de cura. Uno de los objetivos del tratamiento es que la enfermedad entre en estado de remisión, es decir, que quede inactiva o con el sistema inmune sin actividad.
Con las terapias inmunomoduladoras
es posible conseguir este estado en la mayoría de casos, pero no todos los pacientes toleran igual el tratamiento ni todos tienen la misma eficacia.
El futuro es la medicina de las “4 P”:
participativa, personalizada, predictiva y preventiva. Y yo añadiría una quinta “P”: la medicina de precisión. Sin duda, el tratamiento de las enfermedades crónicas y de base genética (como las autoinmunes) pasa por la terapia génica y por la terapéutica con células madre.