Descubre cómo…
• Reducir los granitos • Cepillar tu pelo
CasiCasi una de cada 10 personas tiene acné, un dato que lo convierte en el octavo trastorno más frecuente en el mundo. Afortunadamente, la mayoría de las veces se resuelve con paciencia y buenos cuidados. Y como quien más quien menos ha tenido o tiene granitos alguna vez –no es algo exclusivo de los más jóvenes– a todos nos interesa saber cómo tratarlos. En primer lugar, aunque sea tentador, ¡no los toques! La razón es que, al apretar, la infección puede extenderse por debajo de la piel, con lo cual la zona se inflama y los granitos tardan más tiempo en curar y desaparecer. Esta es la manera correcta de actuar en el caso de tenerlos:
• Si son granos con pus. No los abras ni arranques las costras porque se infectan con las bacterias de las manos y del ambiente. Se tratan con un stick secante o con un parche para el acné. En casos serios, con antibióticos tópicos recetados por el médico.
• Puntos negros. Los comedones abiertos –de color negro debido al depósito de melanina– tampoco hay que presionarlos porque los poros se dilatan y se hacen aún más visibles. Límpialos con tiras especiales para poros y con mascarillas absorbentes de caolín o arcilla.
• Quistes. Los comedones sin “cabeza” que suelen aparecer alrededor de la boca y en la barbilla se resuelven con éxito si aplicas un gel o una crema con ácido retinoico (necesitarás receta médica).
¿Y SI QUEDAN MARCAS? Si has tenido acné es probable que en tu piel hayan quedado secuelas visibles, incluso aunque fuera moderado o ya se haya curado. Quédate tranquila, porque estas lesiones tienen solución.
• “Agujeros” y cicatrices. Desaparecen con tratamientos médicos como los peelings químicos de ácido glicólico, salicílico o retinoico y el láser, que estimulan la regeneración de la piel. Si las lesiones son muy profundas, se rellenan con ácido hialurónico o se extirpan con cirugía.
• Manchas. Son hiperpigmentaciones que aparecen alrededor de los granos que han estado inflamados, sobre todo en personas que tienen la piel oscura. Se aclaran con peelings químicos combinados con cremas con hidroquinona, retinoides y activos antihematomas (vitamina K oxidada y ácido tranexámico).
Toca tu rostro lo menos posible y lava tus manos a menudo para evitar que empeoren