Cuida tu cuerpo
Mantén sana la tiroides
ActúaActúa como el centro de control de nuestro organismo, pese a su pequeño tamaño (unos 5 centímetros) y su poco peso (unos 17 gramos de media). Pero por eso, por ser nuestra “sala de máquinas”, cualquier alteración que sufra es suficiente para acelerar o ralentizar la mayoría de funciones orgánicas. Muchas veces esa alteración viene por no tomar suficiente yodo o por tomar demasiado. Es el mineral que usa la glándula para fabricar las tres hormonas que luego vierte al torrente sanguíneo:
• Hormonas T3 (triyodotironina) y T4 (tirosina). En realidad, la fabricación de ambas depende de otra sustancia que se fabrica en el cerebro (en la glándula pituitaria), la hormona estimulante de la tiroides (TSH). Esta ordena a la tiroides ponerse a funcionar, a fabricar sus propias hormonas. Sin esa orden del cerebro, la tiroides permanecería inactiva.
• Calcitonina. Su principal función es lograr que el calcio no se acumule en la sangre. Si no se eliminara por la orina, los huesos se debilitarían rápido, tendríamos cálculos renales e incluso el cerebro y el corazón se dañarían. Además, unos niveles muy altos (que se verían en un análisis de sangre) podrían indicar cáncer de tiroides.
Haz la prueba del vaso para detectar bultos
Esta sencilla prueba casera puede servir para, en algunos casos, detectar un agrandamiento o bultos en la tiroides. • Sitúa tu rostro y cuello frente a un espejo. Con una mano, coge un vaso de agua y bebe manteniendo el agua unos segundos en la boca.
• Al tragar, observa tu cuello en el espejo con la cabeza echada un poco hacia atrás. ¿Ha aparecido algún bulto más abajo de la nuez de Adán? Repite dos o tres veces, dando tragos más grandes y más pequeños, y vuelve a estudiar la zona. Si el cuello se ha agrandado de forma extraña o ha aparecido algún bulto, deberías consultarlo con tu médico. Además de esa posible hinchazón en el cuello, una ronquera que no se va, la dificultad para tragar o la sensación de tirantez en la garganta pueden indicar que algo obstaculiza el paso del aire (un nódulo o bulto).
Todo lo que la equilibra … y lo que la daña
Como hemos visto, el yodo es el mineral más necesario; y utilizar sal marina yodada una buena forma de conseguirlo. Pero también podemos obtenerlo tomando pescados provenientes del mar
La Asociación Americana de Tiroides aconseja hacer un análisis de hormonas tiroideas cada quinquenio a partir de los 35 años El hipotiroidismo es de 8 a 10 veces más frecuente en la mujer que en el hombre. Las etapas de mayor riesgo son en el embarazo y tras la menopausia
(no de piscifactorías), algas, frutas y vegetales (si el suelo de cultivo es rico en minerales) y lácteos, si los animales han sido criados con pastos. • Ojo con los productos procesados. Suelen contener sal no yodada, por lo que pueden ocasionar déficit de yodo.
• Que tampoco te falte selenio. Es otro mineral esencial para la salud de la tiroides. Lo encuentras sobre todo en las nueces de Brasil, el jamón, el atún y las sardinas. Hay que recordar que las dietas muy restrictivas pueden alterar también esta glándula.
• El tabaco no le sienta bien, ya que provoca que el cerebro fabrique menos cantidad deTSH (la hormona que estimula la tiroides), por lo que puede desencadenar otras alteraciones hormonales.
• Los tratamientos a base de estrógenos. Tomar un fármaco a base de hormona estradiol (muy usado para controlar los síntomas de la menopausia) puede alterar la glándula tiroidea y hacer que funcione demasiado rápida.
Diagnosticar y tratar
Ante la sospecha, una ecografía puede servir para saber que cualquier bulto o nódulo no es maligno o para confirmar o descartar la presencia de bocio midiendo el tamaño de la tiroides.
• Mientras llega el resultado de las pruebas, quizá sea buena medida tomar precauciones. Por ejemplo, dejar de tomar verduras crucíferas (brócoli, coles de Bruselas o coliflor). La razón es que algunas de las sustancias que contienen esos vegetales actúan bloqueando las hormonas tiroideas.
• El tratamiento. Si hay un nódulo (crecimiento anómalo de las células tiroideas), se suele extirpar si es mayor de 3 cm o si hay riesgo de que se vuelva maligno. A veces, es preciso eliminar parte de la tiroides. Tanto el hipotiroidismo como el hipertiroidismo se controlan con fármacos específicos.
Las dietas pobres en minerales o muy bajas en calorías no le sientan bien a la tiroides