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MAZDA CX-3
Hoy en día, más de la mitad de los vehículos que vende Mazda a nivel global son todocaminos, con el CX-5 como líder de ventas dentro de la marca y el CX-3 siguiéndole muy de cerca. Este último, tras tres años en el mercado, acaba de recibir un ligero restyling que le aporta mejoras en confort, insonoriza estético es el que menos ha variado, con grupos ópticos, molduras, llantas y paleta de colores para la carrocería, la cual por cierto mantiene las vistosas protecciones de plástico negro en todo su perímetro.
En el interior, los cambios en molduras y tapicería son aún más sutiles, pero sí hay uno especialmente reseñable: la incorporación de un freno de mano eléctrico, en sustitución del manual, que a su vez habilita espacio para que el CX-3 disponga ahora de un reposabrazos entre los dos asientos delanteros. Además, si bien la pantalla central de 7” es aparentemente idéntica, estrena compatibilidad para dispositivos Android y Apple, aunque solo en el acabado superior Zenith. Y una buena noticia para quien posea un CX-3 previo a este restyling es algo a lo que las marcas no nos tienen acostumbrados: por 250 euros, Mazda ofrecerá la posibilidad de instalar esta actualización de en los CX-3 “antiguos” para que sus propietarios también dispongan de conectividad para Android y Apple.
Por lo demás, la calidad percibida en el habitáculo sigue siendo muy satisfactoria, con una combinación de plásticos blandos y duros con buenos ajustes, una correcta postura de conducción, y la comodidad que aportan los mandos ubicados en el túnel central, a través de los cuales se maneja la pantalla de forma bastante intuitiva. Por otro lado, el CX-3 sigue padeciendo una habitabilidad mejorable, con una parte trasera que no destaca en ninguna medición, aunque dos adultos pueden viajar razonablemente cómodos. El maletero, con 350 litros, se sitúa en la media del segmento.
Dinámicamente, el CX-3 ha recibido muelles y barras estabilizadoras para ser - meza en la suspensión, una característica que le permite ser uno de los SUV urba
Bajo el capó, la principal novedad está en el reemplazo del motor 1.5 diésel de 105 CV por un nuevo 1.8 de 115 CV. Esta nueva mecánica exhibe más fuerza de lo que sus cifras sugieren, con bastante energía a bajas vueltas y un notable ímpetu a medio régimen. Además, suena y vibra poco para ser un propulsor de gasóleo. Y una de las cosas que más celebramos en - no es que, a diferencia de la mayoría de sus rivales, el CX-3 ofrece versiones de tracción total. Aunque se trata de un SUV urbano y, por tanto, no dispone de las cotas más propicias para circular fuera del asfalto, la tracción total conectable le aporta un extra
EL CX-3 CONTINÚA SIENDO UNO DE LOS SUV URBANOS MÁS GRATIFICANTES DE CONDUCIR, Y TAMBIÉN UNO DE LOS QUE OFRECE MEJOR EQUIPAMIENTO DE SERIE