CONSULTORIO
TÚ PREGUNTAS Varios lectores nos habéis hecho llegar cuestiones acerca de los alternadores reversibles empleados por algunos de los actuales sistemas Start&Stop. Hemos preparado una explicación en la que vamos a intentar dar respuesta a todas ellas explicando cómo funciona este tipo de sistemas y cuáles son sus componentes.
TT RESPONDE El alternador debe proporcionar la corriente eléctrica necesaria para la carga de la batería, así como suministrar corriente a todos los sistemas eléctricos que lo requieran. En la actualidad, los vehículos incorporan gran cantidad de componentes que requieren una elevada demanda de alimentación eléctrica y que, por tanto, necesitan sistemas capaces de responder a estas exigentes solicitaciones eléctricas.
El alternador reversible o ISA (siglas inglesas de Alternador y Arrancador Integrados) se encarga no solo de generar electricidad, sino también de transformar energía eléctrica en mecánica para arrancar
el motor del vehículo cuando el sistema Start&Stop se encuentra activo. Por tanto, el mismo componente cumple las funciones de alternador y de motor de arranque.
Para ello, el sistema cuenta con el componente principal (una máquina eléctrica trifásica), una unidad electrónica y un sensor de posición del rotor del alternador. La máquina eléctrica genera electricidad a partir del movimiento o genera energía mecánica a partir de la electricidad. El módulo electrónico rige la estrategia de acoplamiento de la máquina eléctrica cuando trabaja como alternador (que actúa preferiblemente en las retenciones para no robar energía térmica),
controla el nivel de la carga de la batería, transforma corriente trifásica en monofásica y, por último, conmuta la máquina eléctrica de alternador a motor de arranque cuando se requiere. Finalmente, el sensor de posición permite al sistema saber a cuál de las fases del alternador se le debe dar tensión.
Adicionalmente, puede añadirse también un condensador o súper-condensador cuya misión es cargarse de energía eléctrica en las fases de deceleración del vehículo para poderla utilizar en el proceso de arranque del motor, liberando a la batería de las descargas que se producen con el motor de arranque. Este componente es capaz de cargarse en 5 segundos y vaciarse aportando gran cantidad de corriente en la fase de arranque de un motor diésel en 0,4 segundos.
Para que esta máquina eléctrica funcione, se requiere montar una correa de accesorios especialmente resistente, ya que la correa va a tener que transmitir el par de arranque al cigüeñal, mientras que un motor de arranque normal transmite el par mediante un engranaje.
Una evolución de este sistema para motores especialmente potentes consiste en montar la máquina eléctrica en el propio cigüeñal del motor, sustituyendo al volante de inercia bimasa. De esta manera, es el motor eléctrico el que pasa a realizar la función de amortiguación de las oscilaciones de par. La correa de accesorios se elimina, los accesorios se electrifican, y el motor eléctrico puede asistir al térmico con mayor eficiencia, ya que gira solidario con el cigüeñal. ■