Todo Terreno

ACOGEDOR.

- TEXTO: PABLO J. POZA

La segunda cama es individual, y se coloca sobre un somier de muelles sintéticos Froli. En la cocina hay abundante espacio de almacenaje y una encimera retráctil. Las células de GPR se montan sobre configurac­iones de Sprinter de chasis-cabina.

Pero donde realmente se nota la gran capacidad de la carrocería es en el baño, que cuenta con espacio para separar el inodoro de la ducha, en la que encontramo­s un amplio lavabo plegable y una mampara traslúcida abatible. Dispone también de ventana y diversos compartime­ntos para depositar los utensilios higiénicos.

La cocina se ubica en la zona central, y cuenta con dos fuegos de gas con encendido piezoeléct­rico, un fuerte soporte para ollas de hierro fundido y un fregadero de buenas dimensione­s. Pero quizá nuestro detalle favorito es la encimera retráctil que puede deslizarse desde debajo del armario que hay a la derecha de los fuegos, formando una ‘L’ alrededor de quien cocine. Dos cajones grandes, uno de cubiertos, un estante y dos armarios altos almacenan todos los utensilios y enseres de cocina, mientras que los

productos frescos encuentran su lugar automática­mente entre distintas fuentes de energía.

Pero la Nova M ha sido pensada para poder pasar muchas horas a bordo con el máximo confort, y para ello es imprescind­ible una amplia y cómoda zona de estar. Una de las caracterís­ticas de los diseños de este preparador es el grupo de asientos en forma de L, que se encuentra en el lado opuesto de la cocina, y permite disfrutar de una mini-chaise longue. Por supuesto, no faltan los asientos delanteros reversible­s ni los cinturones de seguridad de tres puntos para las dos plazas del banco - cana a la ventana. Los asientos delanteros, además de ser giratorios, cuentan con un soporte lumbar neumático y un sistema de calefacció­n que opcionalme­nte puede complement­arse con tapicería de cuero y sistema de ventilació­n integrado.

Si te gusta lo que has visto y quieres hacerte con ella, ya habrás supuesto que no va a ser barata. El precio base de la Nova M, en Alemania, con un motor de 163 euros. Este precio incluye todos los impuestos, así como una buena dotación de equipamien­to en la que no faltan ABS, ASR, ESP, luces de circulació­n diurna, sistema de asistencia frente al viento lateral, cierre centraliza­do e incluso el toldo. Ahora bien, las opciones son abundantes, tanto por parte de fábrica como por parte del preparador, por lo que un vehículo con tracción total, motor V6, cambio automático y unos cuantos extras que aumenten el confort a bordo superará

ESTE PUCH 290 GD AMBULANCIA ESTÁ PERFECTAME­NTE RESTAURADO, CUENTA CON 4.500 KILÓMETROS Y ES UN FANTÁSTICO EJEMPLO DE CÓMO LOS MUCHAS VECES DEMONIZADO­S TODOTERREN­OS FORMAN PARTE ESENCIAL DE LOS SERVICIOS PÚBLICOS. _

Ya hemos hablado en otras ocasiones de los Puch Clase G del ejército suizo retirados del servicio que Lorinser ha adquirido y que poco a poco va restaurand­o y poniendo a la venta. Pero el de hoy es un vehículo realmente especial, cuyo valor podría subir en no mucho tiempo.

A las habituales restauraci­ones, los restomods (restauraci­ones con componente­s más actuales que mejoran el aspecto y las prestacion­es de los vehículos originales sin restarles autenticid­ad) y preparacio­nes habituales de Lorinser, se suma ahora la restauraci­ón de este Puch 290 GD que hasta hace poco tiempo formaba parte de - fensa, Protección Civil y Deporte (DDPS) de Suiza.

CARNE DE COLECCIONI­STA

Matriculad­o en julio de 1994, este Clase G correspond­e a la segunda generación de los Clase G industrial­es (W461), está en muy buenas condicione­s y cuenta con la práctica totalidad de sus componente­s originales, a pesar de su antigüedad. Conserva, asimismo, la pintura original, Blanco Ártico, y registra únicamente 4.500 kilómetros en su odómetro, lo que hace de este Clase G “carne de coleccioni­sta”, si bien también podría ser una soberbia base para una autocarava­na todoterren­o destinada a viajar por lugares remotos.

Su precio, 79.900 euros, nos parece una auténtica ganga. Además del equipamien­to médico original (que incluye las dos camillas y una máquina de respiració­n asistida), cuenta con aire acondicion­ado tanto en la cabina como en la zona trasera, que son completame­nte independie­ntes. Hay, de hecho, un ventanuco en la pared que separa la caja de la ambulancia de la cabina, pero la luna trasera de la cabina ni siquiera es practicabl­e.

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