ENTRE EL VERDE Y EL AZUL
ESTE VIAJE LO HAREMOS A UNO DE LOS BALCONES MÁS ALTOS QUE PODEMOS ENCONTRAR ASOMADOS AL MAR: EL DE LA COSTA ÁRTABRA, EN GALICIA, DONDE SE ENCUENTRAN LOS TERCEROS ACANTILADOS MÁS ALTOS DE EUROPA, DESPUÉS DE NORUEGA E IRLANDA.
Nuestro recorrido por la gallega Costa Ártabra nace al norte de la Costa de la Muerte, justo a los pies del faro de los faros: El Faro de Hércules, en La Coruña, una mole imponente que se erige regia, vencedora de vientos y nieblas, gracias a su poderoso rayo de luz salvador de vidas. Como la ruta consiste en navegar entre el verde y el azul, si en la marinería hay iconos, uno es, sin duda, este faro. Y como de hito a hito, me lleva la corriente, otro hito histórico en esta costa es el fuerte de San Felipe, en Ferrol, una dársena natural históricamente inexpugnable a los navíos de guerra enemigos. De nuevo evitamos la ciudad y nos quedamos con lo representativo del camino, una tierra de cumbres escarpadas en las que se abren caminos naturales y que indiscutiblemente el hombre supo reconocer como puertas a la mar.
Cuando abandonamos estas dos importantes poblaciones, La Coruña y Ferrol, es cuando empezamos a descubrir el acierto de nuestra elección. El quebranosotros en un romper de olas inacabables, en una cascada incesante de agua, intentando mover la línea de tierra. Pero la Costa Ártabra, de nuevo, se vuelve generosa y nos ofrece descensos naturales para buscar la caída línea del mar. Esta desconocida costa, pues las Rías Bajas y la Costa de la Muerte son las que se llevan la fama como costas turísticas gallegas, alberga una gran diversidad de elementos paisajísticos que incluyen enclaves únicos. Y es por esto que siguiendo la quebrada cuerda de estos acantilados llegamos hasta El Arenal y la laguna de Valdoviño. Allí la línea del horizonte se confunde en un mar de arenas y aguas quietas. Hablamos de una lámina de agua que ocupa casi 580 hectáreas, con una profundidad de poco más de un metro y medio, que está separada del mar por una extensa duna y que está alimentada por los ríos Vilar y Castro. En el momento adecuado del año, esta laguna, de una salinidad variable en función de la época, es un lugar donde en algunos momentos
AUNQUE LAS RÍAS BAJAS Y LA COSTA DE LA MUERTE SON MÁS MEDIÁTICAS, LA COSTA ÁRTABRA CUENTA CON INNUMERABLES ATRACTIVOS
podemos encontrar algo más de 15.000 aves entre sedentarias y migratorias, un pequeño vergel en formato paraíso…
Las aguas sobrantes de esta laguna descienden hasta la playa Da Frouxeira, un arenal de más de tres kilómetros de arena frecuente viento son los protagonistas. Todos sabemos que el mar Cantábrico se caracteriza por sus bravas y frías aguas, poco apropiadas para el baño. Pero en Frouxeira, la práctica del surf, skysurf o el bodyboar son un reclamo para multitud en esta localidad de Valdomiño, podemos visitar el Océano Surf Museo. Como su nombre indica, es un museo dedicado a la historia y la práctica del surf, que engloba contenido único sobre el desarrollo del deslizarse sobre tablas en la cresta de las olas. La exposición permanente se complementa con exposiciones y actividades itinerantes promulgadas por varias escuelas de surf de la zona. Cuenta, además, con la colaboración del Océano surf club, club de surf decano en Galicia.
CUMPLIENDO CON LA TRADICIÓN
Desde aquí nos desplazamos a uno de los lugares más míticos de Galicia. Entre la nebulosa de cultos, creencias ancestrales, tradiciones e historias, hay un punto mítico y muy próximo: “San Andrés de Teixido, a donde irás muerto si no fuiste vivo”. Nuestro Vitara Mild Hybrid 2021, en su nueva entrega de cambio automático, nos lo puso muy fácil para llegar a esta aldea incrustada en medio de acantilados en la que creencias cristianas y paganas conviven con vistas del recorrido de la Santa Compaña. Esta leyenda popular gallega, la de la Santa Compaña, no es única de aquí. Tanto en la mitología asturiana (la Güestia), como en las provincias de Zamora, León o Salamanca y también al sur, en Extremadura, casi lindando con Huelva, incluso, hay creencias similares. También es conocida, el nombre de la Estantigüa. está en Fisterra como pensaban los antiguos. Está aquí, en San Andrés de Teixido. Este mítico punto se halla al noroeste
CUENTA LA TRADICIÓN QUE SI NO VISITAS SAN ANDRÉS DE TEIXIDO EN ESTA VIDA LO HARÁS EN LA VENIDERA. PARA NOSOTROS ES UN PASO OBLIGADO
Otro hito importante de nuestra ruta es Pontedeume. Este villa, también era una zona estratégica importante protegida por la ría de Ares, la cual fue hogar durante muchos años de una de las familias más influyentes de la historia de la comarca, la familia Andrade. Aún queda como testigo de su prestigio su Torreón, que se puede visitar. Esta característica villa de arquitectura gallega ubicada entre el parque natural de las Fragas do Eume y la desembocadura del río con el mismo nombre, fue fundada en 1270 por Alfonso X, y toma nombre del puente medieval de estilo gótico que domina la ciudad. Este puente llegó a tener unos 850 metros de largo, con hasta 68 pequeños arcos góticos; pero sí es verdad que su actual aspecto se corresponde a su última actualización, en el siglo XIX.
gallego, a poco más de 12 kilómetros de Cedeira, en la provincia de La Coruña. Y allí está esperando al viajero un apóstol, San Andrés, que al contrario que Santiago el Mayor, que llegó para ser enterrado, fue un ex náufrago que estrelló su barca contra el litoral, justo aquí, donde la sierra de la Capelada se desploma en el Atlántico. Recuperado del susto, el apóstol entendió que aquí debía construir una capilla y, cómo no, se dedicó a lo que mejor sabía hacer: Evangelizar las poblaciones célticas de la comarca.
Desafortunadamente para él, éstas, en aquellos tiempos, eran comunidades diminutas, muy dispersas, y San Andrés se puede decir que se estrelló un poco en su evangelización... sobre todo si comdel de Santiago el Mayor, en Compostela, donde los peregrinos acudían en tropel… Ante el disgusto, cuenta la tradición que Jesucristo, haciéndose participe de su infortunio, pronunció una sentencia ecuánime: “Queda tranquilo, Andrés, no has de ser menos que Santiago. “Nadie ha de entrar en el Reino de los cielos sin haberte visitado. Y si no lo hiciera en vida, deberá acudir de muerto”.
Nosotros hemos cumplido, hemos peregrinado a Santiago en alguna otra ocasión y, ahora, también hemos visitado san Andrés y su iglesia en Teixido. Ahora es vuestro turno. TT
YA SEA PARA PRACTICAR SURF, POR TURISMO O POR DEVOCIÓN, LA VISITA A LA COSTA ÁRTABRA ES IMPRESCINDIBLE