MATE RIMAC
El gurú croata habla de driftar un E30 y convertir un Opel Speedster
He sido petrolhead desde el día en que nací, aunque realmente no sé por qué: mi familia no ha tenido nunca nada que ver con los coches. Mi madre me dice que, antes de que pudiera caminar o hablar, solía fingir que me dolían las manos y que me metía en el coche para que dejara de llorar. También guarda los dibujos que hacía en el cole: todos son coches.
Me saqué la licencia de ciclomotor a los 14 años, el carné de moto a los 16 y luego el de coche a los 17. Lo primero que me compré fue un Skoda Octavia 1.9 TDI de primera generación, pero en realidad el primero que conduje fue un 323i E30. Tuve un amigo que era mecánico y entre los dos le pusimos un seis cilindros de 2,5 litros procedente de un Serie 5 E34.
Siempre quise correr, pero mis padres no me escucharon, así que esa era la forma más fácil de comenzar: comprar un modelo de propulsión barato, algunas ruedas de repuesto y listo. Fuimos a carreras de drift en el E30, pero el motor explotó. Así comenzó todo esto de los eléctricos. Había ganado muchas competiciones en Croacia por innovaciones electrónicas y ya tenía dos patentes a los 17. Hacía todo eso en mi garaje al mismo tiempo que jugaba con los coches. Cuando se rompió el motor del BMW decidí convertirlo en un eléctrico. En realidad quería montar el V8 de un M5, pero esos motores costaban 20 mil euros en ese momento.
Después de convertirlo, fui a correr. Todos se rieron al principio, pero seguí mejorando, comencé a ganar y finalmente rompí cinco récords mundiales de la FIA de aceleración. Hice una carrera contra un dragster. Ya sabes: 1.000 CV, un V8 que escupe fuego, neumáticos enormes, etc. Estaba sentado a su lado pensando “Oh, mierda”.
Estaba en este silencioso, pequeño E30 eléctrico. Las luces se pusieron verdes ... Tuve un comienzo perfecto. Lo escuchaba detrás de mí, pero comencé a alejarme, más y más hasta el final. Ese fue un gran momento.
Compré un Opel Speedster y también lo convertí en eléctrico. En ese momento pensé que podría hacer negocio construyendo conversiones para otros, pero el Serie 3 me mostró cuántos problemas hay. El motor eléctrico estaba en el túnel de la caja de cambios, el vano motor estaba vacío y las baterías estaban donde se usaba el asiento trasero. Así que había perdido usabilidad y encima tenía un centro de gravedad superalto. Fue enormemente rápido, pero también muy difícil de manejar. Me di cuenta de que no tiene sentido convertir automóviles con motor de combustión. Tienes que construirlos desde cero.
Tras 10 años, aposté todo por la compañía. No teñía coche propio hasta que los primeros inversores realmente grandes se unieron. Recientemente me he hecho con un Z4, una Ducati Panigale y un M5 de los nuevos. No tengo un Concept_One porque no soy una parte interesada al 100 por ciento en la empresa; si quiero un producto, tengo que pagarlo. El C_Two sí que lo quiero comprar.
Por lo general, soy modesto, creo, pero si hay algo que hago bien, es conducir. Pienso que es importante, porque de otro modo no podría tomar decisiones adecuadas sobre mis propios coches. Tienes que ser un buen conductor para entender lo que el coche tiene que hacer y cómo puede hacer las cosas de manera diferente.
Bienvenido a lo mejor que hemos visto en lo que va de año: un Alpine A110 más ancho y alto inspirado en los coches de rally del glorioso pasado de la marca.
Por desgracia, el SportsX no es un tercer derivado que llegue a completar la gama de Alpine junto al A110 normal y el A110S, más rígido, más bajo y más deportivo. Es lo que la compañía llama un ejercicio de estilo: un automóvil preparado por ingenieros y diseñadores aparentemente aburridos que “explora una nueva faceta de la deportividad”. Deportividad sexy, a juzgar por su nombre.
Se basa en el A110 Pure, que es el básico y en realidad todo lo que el A110 necesita, pero la carrocería y las vías son 80 mm mayores, lo que significa que este one- off no es mucho más estrecho que un Range Rover, mientras que la
altura ha aumentado la friolera de 60 milímetros.
Aunque lo pidas muchas veces por favor, no podrás comprar A110 SportsX, y eso, mis queridos amigos, es una lástima. Sin embargo, por 150,000 euros Alpine te puede vender un A110 Rally desarrollado por Signatech y disponible para equipos privados que compiten en la categoría R- GT, en la que compite por ejemplo el Abarth 124 Rally.