320 CV Y MODO DRIFT
La versión R de la nueva generación llega con nuevos modos de conducción y modificaciones técnicas en la suspensión y en la dirección para crear el “Golf más divertido de la Historia”
Nueva generación y nuevo R, como Dios -o los mandamases de Wolfsburgo- manda: imagen deportiva, tracción a las cuatro ruedas y mucha potencia. Su motor EA888 evo4 de cuatro cilindros y 1.984 cc es capaz de rendir 320 CV, 20 CV más que el Golf R 7 y que el GTI Clubsport, y de entregar 420 Nm entre las 2.100 y las 5.350 rpm, cifras digeridas por un cambio de doble embrague DSG de siete marchas -y levas más grandes-. Éste se encarga de transmitir la fuerza al los dos ejes de una forma novedosa en la casa para ser la versión más efectiva, pero también la “más divertida de la Historia”, según nos comentó Benjamin Leuchter, piloto y desarrollador del vehículo.
De mejorar su comportamiento se encarga el ‘R-Performance Torque Vectoring’, un sistema que gestiona la fuerza que se manda al eje delantero y al trasero, aunque lo más importante es que también controla la de las dos ruedas posteriores, que puede ser diferente. También es nuevo que trabaje junto con la suspensión adaptativa DCC y el bloqueo electrónico del diferencial (XDS).
No es novedad la posibilidad de elegir entre varios modos de conducción, pero sí que esos perfiles tengan submenús. Me explico. A los ya conocidos ‘Comfort’, ‘Individual’ y ‘Race’ se suma ‘Sport’, que sustituye al ‘Eco’. Pero lo más importante no es eso, sino que el ‘Race’ integra los modos ‘Special’ y ‘Drift’. El primero de ellos pone en funcionamiento los parámetros para conseguir la mejor respuesta en Nürburgring-Nordschleife, como demuestra el tiempo logrado, 7:51, 17 segundos más rápido por vuelta que su predecesor. El segundo hace que el coche deslice gracias a que es capaz de mandar más par a la rueda exterior en la curva. Lo sé, no han descubierto la pólvora, puesto que el Mercedes A45 AMG y el Ford Focus RS ya lo equipaban, pero sí es novedad en Volkswagen.
La imagen del nuevo Golf R es inconfundible, no solo por su color característico ‘Lapiz Blue metallic’ -la gama la completan el ‘Pure White’ y el ‘Deep Black Pearl Effect’-, también por los estribos laterales y los paragolpes, más musculosos; las llantas ‘Jerez’ de 18” -opcionales son las ‘Estoril’ y las ‘Adelaide’, estas últimas