Señor Mofletes
En 1949 ENASA desarrolló su primer camión en versión tractora. Inicialmente el Pegaso Z-701, popularmente conocido como "Mofletes", montaba un motor diésel de 125 CV y no fue hasta 1954 cuando por exigencias del transporte nacional su potencia se elevó ha
Fruto de la evolución de ENASA en 1954 aparece el modelo Pegaso Z-701 “Mofletes” de 140 CV en versión tractora. Las características más reseñables de este novedoso camión estaban en su nueva mecánica, en su cabina y en una caja de cambios de 8 + 2 relaciones sin sincronizar.
Desde el principio el Pegaso Z-701 disfrutó de la ventaja de tener una escasa competencia en el mercado
nacional, lo que se tradujo en una rápida aceptación por parte de los transportistas de la época.
Entre sus virtudes estaban su buena capacidad de ascenso y su razonable fiabilidad, bazas sobre las cuales el "Mofletes” cimentó en todas sus versiones diésel parte de su éxito comercial en la década de los años cincuenta.
Lógicamente esta versión tractora con un peso máximo del conjunto en carga de 23.910 kg, presentaba algunas diferencias con respecto a la versión rígida de este mismo modelo. Por ejemplo el largo del bastidor, el paso entre ejes, la relación del eje trasero o las medidas de los neumáticos.
Nuestra maqueta
En esta ocasión el camión que traemos a la sección de Minimanía es un Pegaso "Mofletes" Z-701 fabricado en el periodo 1954-1955 y que ya incorpora la mecánica diésel de 140 CV.
La maqueta a escala 1/43 corresponde al fabricante IXO y como sucede en la mayoría de los casos ha sido sometida a una transformación más o menos profunda para conseguir el detallado resultado final que puede apreciarse en las fotografías.
Las modificaciones realizadas afectan, por un lado, al interior de la cabi-
na donde hemos repintado asientos y tapizado con tonos más acordes a la época, para continuar trabajando sobre la decoración exterior, donde se han colocado varios rótulos de una conocida empresa de bebidas refrescantes. También hemos introducido mejoras en la parte superior de la cabina y en su trasera con la incorporación de los tubos del aire para la plataforma.
Precisamente donde más se ha trabajado es en el semirremolque, que como en el caso de la tractora también presenta escala 1/43. En primer lugar en esta unidad hemos optado por quitar un eje completo, para después sustituir la decoración original por otra más acorde con nuestros objetivos. Los cromados tan típicos en los camiones de los años cincuenta tienen también una fuerte presencia con el objetivo de conseguir un toque de nostalgia en la maqueta. Nos parece que con todo ello el resultado final que hemos conseguido es un conjunto armónico, agradable a la vista y muy fiel a la realidad, una cuestión esta última que a la vista de todos los detalles deberá ser valorada por los profesionales y aficionados más veteranos. Como siempre la elección del diorama de fondo es una decisión fundamental para que cualquier maqueta pueda ganar realismo y enteros de cara al observador, para lo cual hemos elegido un par de escenarios. Uno es un taller original de la época a escala 1/43 y otro es un tramo de carretera con sus típicos relieves.