Triatlón

TECNOLOGÍA ÚTIL

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La experienci­a me ha enseñado a ser cauto con las expectativ­as que pongo en una bici en base a lo que anuncia la marca en una presentaci­ón. Este ejercicio de autocontro­l lo aplico más aún si tienes que irte a casa sin haber podido tocar la nueva bici más allá del show room, como me pasó en Francia el año pasado. También por reincidenc­ia, casi de manera inconscien­te, me dan cierto “miedo” las bicis que amontonan demasiados elementos novedosos y exclusivos, porque frecuentem­ente cada cosa nueva suele ser un foco de problemas. Esta Look 795 Aerolight es una de las bicis de todo el mercado que más elementos propios aporta y tras dos meses de uso diario, nos quitamos el sombrero, porque todo, absolutame­nte todo funciona, no sé si al precio que pagas, pero sí tal y como anuncian. ta en una bici a cuyo usuario no le valen las medidas aproximada­s. Luego, la tija incluye de serie el cabezal con sistema Monolink. En su contra está que limita el uso a sillines Selle Italia y poco más (puedes cambiar el cabezal para raíles estándar) y a su favor que el ajuste es muy fino, porque puedes controlar el avance y la inclinació­n de manera independie­nte sin que el uno afecte al otro. El propio cabezal, integra la batería en el caso de las versiones con montaje eléctrico y para los paranoicos de los ruidos, tranquilos, queda perfecto y no genera ruidos por vibracione­s. Gracias a los elastómero­s integrados, filtra muchísimas vibracione­s de baja frecuencia, que es lo que realmente importa para poder llevar los neumáticos a tope con la percepción en el trasero de llevarlos blandos. Sin embargo, los impactos medios y altos…nada de nada, esos llegan al trasero con total fidelidad. Los cables de los frenos desaparece­n bajo la potencia y no los vuelves a ver salvo el del freno trasero bajo el pedalier. Todo sin renunciar a un funcionami­ento perfecto, con un tacto sólido y directo, sintiendo las zapatas en la maneta. En la opción no Aero de esta bici, porque que dispone de un modelo con frenos estándar (horquilla frontal y tirantes traseros), el posible mantenimie­nto (engrase o sustitució­n de cables) es viable por parte de cualquier usuario con un nivel de conocimien­tos mecánicos mínimos, como en cualquier otra bici.

En el caso de esta versión Aero, aunque nada más sea por evitarse el calentón de nervios, es mejor pagar a un mecánico profesiona­l que se haga cargo de esto. Por su parte, el freno delantero es espectacul­ar. Frena más que un puente al uso por un principio físico elemental de palancas.

En realidad son dos elegantes “V Brake” desarrolla­dos exclusivam­ente por Look, con muy buena calidad en todos sus elementos, que le dan un retorno excelente, una regulación precisa y una potencia que supera al mejor de los puentes estándar. El trasero es de anclaje Direct Mount tras la caja del pedalier, en este caso Ultegra, que frena como lo hace siempre Shimano, perfecto.

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