Consideraciones prácticas
Los entrenamientos de carrera con baja disponibilidad de hidratos de carbono, bien porque se hacen a primera hora de la mañana en ayunas, bien porque hemos eliminado de nuestra dieta los carbohidratos, o incluso porque nuestros depósitos están agotados por una sesión anterior, deben ser cuidadosamente planif cados dentro de nuestro plan de entrenamiento para que cumplan la función de ayuda a la mejora de nuestro rendimiento a través de la adaptación a situaciones similares que luego nos vamos a encontrar en competición, sobre todo en media y larga distancia. Para ello, es conveniente tener en cuenta las siguientes consideraciones: La intensidad de este tipo de sesiones es baja: el entrenamientotipo a realizar en estas sesiones será una carrera lenta fácil. En cuanto a la duración, depende de nuestra experiencia, entre 30 y 40 minutos, si no tenemos experiencia, hasta las dos horas en el caso de triatletas mucho más experimentados que han ido aumentando paulatinamente la duración a medida que ganan experiencia y los resultados son alentadores.
Relacionado directamente con lo anterior, está desaconsejado realizar entrenamientos intensos, submáximos…
Aunque se realice en ayunas, para mantener la intensidad, si el entrenamiento es largo se puede ingerir antes del mismo cafeína y durante su realización carbohidratos de asimilación rápida.
Está indicado tomar proteínas antes, durante o inmediatamente después, con el f n de atenuar la degradación de proteínas musculares.
El entrenamiento en ayunas debe compatibilizarse con sesiones de entrenamiento de alta intensidad en los que se toman hidratos antes y durante el entrenamiento, simulando las situaciones que luego nos vamos a encontrar en las competiciones en las que participamos, tanto desde el punto de vista de la intensidad como de la nutrición previa y durante la carrera.