La Razón (Madrid) - Tú Economía
EL RESURGIR DE LA TIENDA DE BARRIO
LaLa globalización es imparable, pero deja resquicios. Las calles del centro de las grandes ciudades se han transformado en enormes centros comerciales que repican las marcas y enseñas de las multinacionales. Marcas que se repiten en cualquier urbe de cualquier continente. El comercio se debate entre las cadenas de franquicia y las ventas online. En medio, los de proximidad, un are edición moderna de lo que antiguamente era la tien el
da del barrio, buscan su hueco. La facturación del comercio electrónico ha crecido en España un 260% en el último lustro, según la Comisión de los Mercados y la Competencia. Casi 20 millones de españoles aseguran comprar productos por vía electrónica. La logística es fundamental en este negocio. Seur calcula que el 12% de las compras en España ya se efectúan en la red. Los cambios de hábitos, las nuevas tecnologías y la evolución del mercado laboral crean varios fenómenos en paralelo. En E E U U, el más evidente es la concentración de poder y dominio tanto en la venta como entre los proveedores de Amazon. La firma representa el 49% de las ventas online norteamericanas. Esta semana, Bruselas ha abierto una investigación contra este emporio por presuntas prácticas contra la competencia. A la vez, esta potencia de fuego de internet está provocando el cierre de centros comerciales en E E U U. En España, no se ha llegado a eso y se siguen presentado nuevos proyectos en la periferia de las principales ciudades. No obstante, más de 10.000 pequeños establecimientos bajaron el cierre para siempre en los dos últimos años. A la vez, renace el comercio de proximidad. Las grandes distribuidoras han descubierto que con tiendas más pequeñas, con ofertas más cortas, horarios más flexibles, mejor atención al público, con un trato más personalizado, productos más frescos, con locales dentro de la ciudad, en los barrios, existe una receta para el éxito. Además, lo pequeño y próximo no tiene por qué estar reñido con la innovación. Ésta también acude a la ayuda del pequeño comerciante; con servicios webs, con aplicaciones cercanas a los vecinos y con la posibilidad de establecer una diversidad y especialización que no pueden acceder siempre los gigantes del retail. El comercio de cercanía ofrece otras ventajas a las grandes ciudades. Llenan la calle, evita la degradación de zonas urbanas, multiplica ofertas. Es una oportunidad para las pequeñas marcas, crean vecindario y empleo, son el asidero poblacional de pequeñas localidades y supone el maridaje perfecto con el ocio.
«El comercio de cercanía llena las calles y evita la degradación de las zonas urbanas»