La Razón (Madrid) - Tú Economía
Cuello de cisne
LaLa economía española se enfrenta a numerosos riesgos. Los cuellos de botella internacionales nos afectan con más intensidad debido a nuestra estructura productiva. Contamos con un mayor peso de las exportaciones en el PIB, alrededor de un tercio del total, y el turismo es el sector más afectado por los vaivenes de las distintas variantes covid. Sufre un constante efecto acordeón de apertura y cierre que agota a cualquiera.
Por eso, en España, a pesar de la mejora de las cifras de empleo, el cuello de botella que conforman restricciones, suministros en la industria, transporte y falta de camioneros estrecha los márgenes para convertirse en un cuello de cisne. Lo peor es que termine en cuello de avestruz y escondamos la cabeza.
El Banco de España no ceja en advertir del crecimiento de la incertidumbre y avisa de factores de riesgos que pueden lastrar la recuperación. Los tirones de oreja llegaban antes desde la OCDE aunque tampoco se quieran oír desde el Gobierno.
Por otro lado la inflación preocupa sobre manera. No solo porque incrementa costes, recorta el poder adquisitivo de las familias y reduce la competitividad de las empresas, también porque abre la puerta a la subida de tipos de interés.
Otro riesgo llega por el lado de la burocracia que puede frenar y arruinar la ejecución de los Fondos Europeos. Los legajos se acumulan en las ventanillas de la Administración y pueden transformarse en documentos históricos. Además, en la captación de los dineros llegados desde Bruselas las pymes están siendo desplazadas por las grandes compañías, como ocurrió con el Plan E, donde el dinero terminó, en muchos casos, en el cementerio del pueblo.