Un valor real

StadistaStadista es una base de datos e indicadores de 170 sectores, de más de 150 países y estadísticas, también de acceso y uso desde universidades y centros de análisis. Uno de sus trabajos ha venido a valorar lo que la Corona británica, como institución, genera en publicidad e imagen-país. Para sus empresas y ciudadanos, ya en forma de continuidad histórica, estabilidad institucional, prestigio, inspiración de alto nivel, atracción mediática o turística. Y el valor de la marca compite con las grandes empresas multinacionales. Superior a firmas automovilísticas como Mercedes-Benz, o Volkswagen-Seat; petroleras potentes como Royal Dutch Shell, o Repsol; bancos globales, como Santander o Barclays; firmas aeronaúticas como Airbus o Boeing; o empresas no financieras como Coca-Cola, o Zara. Estando solo por detrás de las modernas tecnológicas como Facebook, Amazon, Google, y Apple, en quinto lugar. Especialistas de Brand Finance valoran la marca de su Casa Real en más de 84.000 millones de euros. E Isabel II añade su fortuna personal de más de 335 millones, en obras de arte, joyas, sellos, tierras, palacios, y otros activos mobiliarios e inmobiliarios. Con unas de las caras más mundialmente conocidas.

En España, lamentablemente, algunos insisten en erosionar la Corona y la Casa Real. Internacionalmente conocida, políticamente apreciada, extraordinariamente valiosa y reconocible hasta bien entrado el siglo XXI. No ganamos desprestigiando al Rey padre, Juan Carlos I, el valor –aun con sus errores finales– de los intangibles aportados durante su reinado es un patrimonio que todos debiéramos preservar.