Rusia Ucrania: ¿gana China?

DesdeDesde algunas atalayas a nivel nacional, también internacional, se empeñan en justificar lo injustificable. Sorprendentemente, o no, ponen en el mismo plano a agresor y agredido. Tras dos semanas de invasión, el drama social crece.

En el plano económico, debemos poner en valor la puesta en marcha de una de las mayores respuestas económicas y financieras desde la Unión Europea contra un país, potencia relevante en el ámbito geopolítico global. Entre otras acertadas medidas, se encuentran las restricciones al uso del sistema de transacciones SWIFT y la congelación de la mayoría de activos del banco central ruso en el exterior. Ambas tendrán efectos, pese a que el gobierno ruso se pertrechó con más de 630.000 millones de dólares evidenciando previamente sus intenciones.

La reacción de los mercados financieros a la baja ha sido inmediata, junto a las principales «commodities», reflejando cambios reseñables, con subidas del coste de la energía, gas y petróleo. ¿Consecuencias? Sin duda las más directas una inflación creciente, que seguirán pagando el ciudadano de a pie, familias y pymes. También un menor crecimiento económico, entre un 0,5-0,6% menos, y eso suponiendo que no se alargue la guerra.

Y por supuesto habrá que ver cómo terminan de encajar los bloques geopolíticos y económicos a nivel internacional, una de las claves de todo este sin sentido. ¿Pasará Rusia de ser un proveedor europeo, al menos de gas y materias primas a ciertos países, a ser un aliado natural y muy dependiente de China?