Futuro conectado, electrificado y sostenible

La transformación de la industria automovilística ya está en marcha, un proceso imparable que ha provocado toda una reinvención del sector. Pero ¿cómo será la movilidad futura? Los expertos lo tienen claro: autónoma y compartida, electrificada y sostenible. Así, el concepto de empresa industrial con el que tradicionalmente se ha asociado al sector está migrando hacia otro vinculándolo a compañías de software y de servicios. Ejemplo de ello es CARIAD, la filial del Grupo Volkswagen que integra todas la competencias de software y hardware de la marca, y sobre la que sustenta el desarrollo del coche del futuro, que será conectado y autónomo.

España deberá tener en circulación entre 1,6 y 2 millones de vehículos eléctricos en ocho años si se quiere cumplir con los objetivos de reducción de emisiones de la UE, según datos de Deloitte. Por ello, la industria ha anunciado importantes inversiones para el desarrollo de estos vehículos y también en plantas para la fabricación de baterías, sin olvidar el desarrollo de otras tecnologías no contaminantes, como es el vehículo de pila de combustible que utiliza el hidrógeno para su propulsión.

Un proceso revolucionario que, no obstante, exigirá transición ordenada, con plazos realistas para que nadie se quede en el camino. «Nadie duda de hacia dónde tenemos que ir, pero si los pasos se aceleran, habrá muchos que no lo puedan seguir. La política tiene que impulsar esta nueva realidad, pero sin olvidar la economía, y sin que se generen nuevas brechas», concluye Marta Blázquez, vicepresidenta de Faconauto.