La música suena en los coches desde hace casi un siglo. La tecnología para escucharla ha evolucionado mucho
Es la mejor compañera de viaje: siempre está disponible, alegra, relaja o permite concentrarnos. La música suena en los coches desde hace casi un siglo. La tecnología para escucharla ha evolucionado tanto como los vehículos
La primera noticia que se tiene de la instalación instalación de un aparato capaz de reproducir música en un coche es del año 1904. El inventor, Lee de Forest, hizo una demostración demostración con una radio instalada en un coche coche para la Lousiana Purchase Exhibiton, celebrada en la ciudad norteamericana de San Luis. Pero aquello fue flor de un día. Al igual que el intento de una empresa australiana australiana en 1924 de llevar la radio al interior interior del coche.
Sí lo conseguiría ya en 1930 la empresa norteamericana Motorola que comercializó comercializó en Estados Unidos su modelo 5T71 por 130 dólares de la época. Un precio muy elevado: un Ford modelo A de ese mismo año costaba poco más de 500 dólares. Con lo que costaban tres radios casi te comprabas comprabas un coche nuevo.
UN SALTO CADA 10 AÑOS
A este lado del Atlántico habría que esperar esperar hasta 1932 para encontrar a la venta radios para coche: Blaupunkt ofrecía su modelo AS5 por algo más de 400 marcos de entonces. Era una radio que sólo captaba captaba la onda media y tenía en su precio uno de sus inconvenientes.
Otro era el tamaño. Las radios de entonces, entonces, que funcionaban con tubos de vacío, ocupaban mucho espacio: la Blaupunkt AS5, nada menos que 10 litros. Poco a poco se fue recortando el espacio necesario para la radio. Así, la holandesa Philips comercializaba comercializaba en 1937 el modelo 247B, que ocupaba ya «solo» ocho litros.
A principios de la década de 1940 se calcula que había unos nueve millones de radios de onda media instaladas en coches de todo el mundo. En los inicios de los 50 comenzaron a llegar las radio bibanda: primero, con onda media y onda larga; posteriormente, combinando la primera con frecuencia modulada. Unas de las primeras fueron de las marcas Blaupunkt y Becker. Por su parte, la holandesa Philips volvió a dar un paso adelante en el año 1964, cuando comenzó a vender los reproductores reproductores de casete. En 1968 aparecería el primer radiocasete Philips para coche. En esta misma década, las radios y radio-casetes radio-casetes comenzaron a menguar en tamaño cuando llegó la tecnología de transistores. La alemana Becker, con su modelo Monte Monte Carlo, fue la primera en aplicarla en el automóvil.
TECNOLOGÍA DIGITAL
Los casetes serían inseparables compañeros compañeros de viaje durante un par de décadas. Hasta que en 1982 apareció el Pionner CDX-1, el primer reproductor de discos compactos para el automóvil. Gracias a la tecnología digital, en menos espacio cabía más cantidad de música y, además, con una mejora en la calidad de sonido. A fi
nales de la década de 1980, muchos coches coches de gama alta ya incluían equipo radio-CD radio-CD de serie.
En la década de la década de 1990 se harían muy populares los cargadores de CD, que permitían almacenar entre xinxo y diez discos. De esta forma, se podía afrontar un viaje largo con toda la música seleccionada: seleccionada: se insertaban los discos en el cargador (normalmente instalado bajo el asiento o en el maletero del coche) y se iban eligiendo uno a uno o, en algunos modelos, se podían reproducir de forma continua.
Con la llegada del siglo XXI se popularizan popularizan los equipos de música integrados en el salpicadero del coche. Ya no había que llevarse el radiocasete o el radio-CD portátil portátil para evitar su robo. Y, poco a poco, estos aparatos integrados comenzaron a dar la posibilidad de leer discos de CD con grabaciones en formato MP3, gracias al cual cabían muchas más canciones en un disco.
De ahí pasamos a poder conectar con un cable nuestro reproductor de mp3 (Ipod, por ejemplo) al coche o enchufar una memoria memoria USB repleta de canciones. Y, pocos años después, hacer lo mismo de forma inalámbrica gracias a la tecnología Bluetooth. Bluetooth. Pero no ya desde nuestro reproductor reproductor de mp3, si no con un disco duro de almacenamiento almacenamiento presente en nuestro o coche o un teléfono inteligente como el que todos llevamos en el bolsillo.
Hoy, con la tecnología Apple CarPlay, Android Auto o Mirror Link, toda la música música que llevamos en el teléfono se reproduce reproduce en el coche sin tener que tocar un solo botón: bastan órdenes vocales para encontrar la canción que nos apetece.