MALDITO VIRUS
NO VOY A REPROCHAR LA MALA GESTIÓN DE ESTA CRISIS. SI LAS COSAS YA ESTABAN COMPLICADAS PARA ESTE SECTOR, CON ESTA PANDEMIA EL FUTURO, SI LO HAY, TIENE PINTA DE SER NEGRO
LaLa industria española del motor ha parado ante el peligro de contagio y, por tanto, ha entrado en «zona roja» los empleos de más de 300.000 personas. Los ERTE han llegado y las marcas ven cómo el año 2020 va camino de convertirse en una pesadilla para sus ventas. El cierre «temporal» de las fábricas ha sido la primera de las consecuencias, pero después ha venido el de los concesionarios y en general de todo lo relacionado con el automóvil y la motocicleta. Y cuando digo todo, es todo, porque hasta las marcas de camiones o de neumáticos se han visto obligadas a cerrar. Es decir, desde Renault a Ford, pasando por MB, Citroën, Peugeot o Iveco, todas han parado. Y otras como Nissan, que está en fase de cierre en Zona Franca de Barcelona, han aprovechado la coyuntura para decir que cerraban cuando la realidad es que ya estaban trabajando en la confección de las listas de despedidos. Y si la industria está en un momento determinante de su historia, afrontando una transformación hacia nuevas fuentes de energía, al mundo del deporte del motor le ha sucedido algo parecido. La realidad es que todo se está parando en el mundo y las medidas que se están tomando, por lo menos en España, no hacen presagiar nada bueno. El «Gobierno Pachuli» pasa por completo de la industria del automóvil e incluso yo diría que les «vacila» en cada reunión. Para ellos este universo sólo sirve como fuente de ingresos vía recaudación impositiva y como tal la tratan. No hay planes de renovación del parque. No hay planes de ayuda a la industria para que realice la transformación necesaria hacia las nuevas fuentes de energía y, en general, no hay planes de nada. Eso sí, el Sr. Ábalos se cierne sobre las autovías para cobrarnos por circular por ellas. Algo curioso si tenemos en cuenta que la red de autopistas se construyó en gran medida con los impuestos. Reconozco que mi opinión sobre este Gobierno no es para nada benévola porque se ha cebado con todo lo relacionado con el Motor desde que llegó al poder. Es decir, en menos de dos meses, la colección de «globos sonda» es tan grande como la de información/desinformación que siguen sus ministros. Es un Gobierno perdido, que ataca al diésel sin conocer el numero de trabajadores que en España trabajan en marcas que producen este tipo de mecánicas. Un Gobierno que piensa que la electricidad es el maná caído del cielo, pero que no ayuda con reducciones fiscales para la compra de este tipo de automóviles. Un Gobierno, que, por qué no decirlo, no gobierna, sino que, día tras día, nos deja clara su incompetencia con idas y venidas y «donde dije digo, digo Diego». Pero España, su industria y, sobre todo, los españoles estamos por encima de este tipo de cosas. Las superaremos, como superaremos el maldito Covid19, con sudor, lágrimas y esfuerzo. Y cuando todo pase, cojan su coche y salgan a dar un paseo, sin prisa, sin ruta, disfrutando de cada kilómetro, de cada curva. Y, por supuesto, paren a tomarse un café en un bar, de pueblo o de carretera, porque este país lo tenemos que levantar entre todos.