CUESTIONARIO PROUST

Su mayor extravagancia es ver patinaje sobre hielo y le encantaría reencarnarse en Sasha Cohen. De momento, y antes de morir como le gustaría —“De un solo disparo o fulminado por un rayo”—, el novelista, guionista y director de cine (Madrid, 1967) publica ‘Sábado, domingo’ (Alfaguara).

¿Cuál es su idea de la felicidad perfecta? La gente que quiero, durmiendo tranquila. ¿Cuál es su gran miedo? La gente que quiero, sufriendo. ¿Cuál es el rasgo que más le desagrada de sí mismo? Hablo demasiado. ¿Cuál es el rasgo que más le desagrada de los demás? Que su sentido de la justicia se base solo en su propia suerte. ¿Cuál es su mayor extravagancia? Ver patinaje sobre hielo a altas horas de la madrugada con el entusiasmo de un forofo. ¿Cuál es su estado de ánimo actual? Inquieto. ¿En qué ocasiones recurre a la mentira? Casi siempre, pero en mi oficio lo llamamos ficción. ¿Qué es lo que menos le gusta de su aspecto? Cuando engordo. ¿Qué persona viva le inspira más desprecio? Aquellos capaces de maltratar a alguien más débil. ¿Qué palabras o frases utiliza con demasiada frecuencia? La Mare de Déu quan era xiqueta. ¿Qué o quién es el gran amor de su vida? Mi mujer y mis hijos. ¿Cuándo y dónde fue más feliz? Un día cualquiera en el que estaba tranquilo. O paseando solo por Tokio. Si pudiera cambiar una cosa de usted, ¿qué elegiría? Ser rico no estaría nada mal. ¿Cuál considera que es su gran logro? Sobrevivir. Si fuese a morir y pudiera reencarnarse en otra persona o cosa, ¿qué sería? Sasha Cohen, mi patinadora preferida. ¿Cuál es su pasatiempo favorito? Deportes. Fútbol, boxeo, natación, atletismo y, claro está, patinaje sobre hielo. ¿Cuál es su rasgo más característico? Tiendo a ser un poco brasas. ¿Quiénes son sus escritores favoritos? Virginia Woolf, Pavese, Robert Lowell, Marguerite Duras, Baroja y mil más. ¿Quién es su héroe de ficción? Corto Maltés. ¿Quién es su héroe real? Mohamed Ali. Desde que era niño. ¿Con qué personaje histórico se siente más identificado? El canario Piolín. ¿Cuáles son sus nombres favoritos? Virginia. Era el nombre que me puso mi madre cuando esperaba a una niña. ¿Qué es lo que menos le gusta en el mundo? El egoísmo. ¿Cuál es su gran pesar? Ser tan egoísta. ¿Cómo le gustaría morir? De un solo disparo o fulminado por un rayo. ¿Cuál es su lema? “Tampoco era para tanto”.