LEJOS de los ‘PAPARAZZI’
A sus 59 años, Isabel Sartorius ha elegido ayudar a los demás como ‘coach’. Repasamos los momentos claves de su vida.
LA VIDA DE ISABEL SARTORIUS (Madrid, 1965) podría haber sido la de una princesa de cuento de hadas que encuentra a su príncipe azul y son felices para siempre. Pero pese a que muchos soñaron con ese final feliz durante años, Isabel tuvo que luchar contra las vicisitudes de la vida desde que era casi una niña. Su nombre ha vuelto a los medios en los últimos meses por la muerte el pasado enero de César Alierta, el que fuera presidente ejecutivo de Telefónica, con el que mantuvo una relación desde 2017 y hasta 2021. Ella ha optado por vivir de manera hermética y son pocas las veces que se la ha visto en público en los últimos años. Quizá ese hermetismo le viene de la presión mediática que experimentó cuando tan solo era una veinteañera y su imagen comenzó a girar por medio mundo tras aparecer a bordo de una lancha recorriendo la isla de Cabrera. Era 1989 y su acompañante no era otro que el entonces príncipe Felipe, de solo 21 años, al que había conocido en la archifamosa discoteca Joy Eslava, punto de encuentro a finales de los ochenta de los rostros de la jet madrileña. “Esa misma noche comencé a quererle”, escribiría Sartorius 13 años más tarde en su libro autobiográfico, Por ti lo haría mil veces. Felipe fue un gran apoyo para ella, una joven que nunca había estado en el ojo público pero que sí sabía lo que era sufrir, debido a los malos tratos que recibió su madre, Isabel Zorraquín, por parte de su segundo marido y a los posteriores ingresos de esta en clínicas de desintoxicación, así como a
SU IMAGEN DIO LA VUELTA AL MUNDO EN 1989 AL SER RETRATADA EN UNA LANCHA CON EL PRÍNCIPE FELIPE
graves problemas económicos que había padecido en sus propias carnes desde muy pequeña. Tras la ruptura con el hoy rey Felipe VI, Isabel quiso desaparecer y se marchó a Londres. Luego se enamoró de Javier Fitz-JamesStuart de Soto (quien luego se casaría con María Chávarri) y con él tuvo a su hija Mencía, su gran amor y su mayor orgullo. Los peores momentos de su vida llevaron a Isabel Sartorius a renacer de sus cenizas y comenzar una nueva etapa como coach especializada en Life Coaching y en Inteligencia Emocional. La que un día pudo ser reina de España hoy prefiere vivir lejos de palacio y ayudar a los demás. _