FINLANDIA
Maravilla natural a todo color
OtoñoOtoño es una de las mejores épocas del año para viajar a Finlandia y disfrutar del increíble colorido de sus paisajes y de fenómenos naturales que serán difíciles de olvidar. Pero también es una buena ocasión para sumergirse en el acogedor estilo de vida de los finlandeses, sus tradiciones y su deliciosa gastronomía.
DOBLE AURORA BOREAL
Aunque mucha gente asocia la aurora aurora boreal con el frío y la nieve, lo cierto es que el otoño, junto con la primavera, es la estación en la que este fenómeno es más activo debido debido a la orientación de la Tierra hacia hacia el Sol. Además, en esta época, las “llamaradas” de luz en el cielo son especialmente espectaculares. Y su reflejo en las aguas de los lagos, que aún no están heladas, crea un hermoso y sorprendente efecto de doble aurora.
EXPLOSIÓN DE ‘RUSKA’
Pero no es el único espectáculo que nos espera. Bosques y páramos se tiñen de ocre, marrones, rojizos, verdes... verdes... En Laponia, utilizan una sola palabra, “ruska”, para referirse a la amplia variedad de tonalidades que adoptan las hojas en otoño. Aunque el momento álgido varía cada año, a finales de septiembre es un buen momento para contemplar este lienzo lienzo natural en todo su esplendor.
EL HOGAR DE PAPÁ NOEL
No podemos irnos de Laponia sin visitar en Rovaniemi la cabaña de Papá Noel. Allí, grandes y pequeños pequeños son bienvenidos todo el año. Vale la pena hacer un alto en el camino para charlar con este afable personaje, saber cómo se las ingenia ingenia para llevar los regalos a todos los rincones del mundo con la ayuda ayuda de su reno, Rudolph, y dejarse contagiar de la magia del lugar.
PAN DE CENTENO, UN TESORO
Y para hacer del viaje una experiencia experiencia placentera redonda, nada mejor que degustar la cocina del país, en la que el pan de centeno ocupa un lugar destacado. Por algo fue elegido alimento nacional en 2017, coincidiendo con el centenario de la independencia; y los finlandeses se lo llevan incluso cuando se van de vacaciones. Las patatas con arenque o huevas de pescado y los pasteles de Karelia son otras delicias delicias que no hay que perderse.