Casa en León
La madera es cálida y funcional
El proyecto de esta casa rural ubicada en la provincia de León se centró en la reforma integral de una vivienda ya existente en un pequeño municipio de la montaña leonesa. La comodidad y las vistas son los dos ejes sobre los que gira el proyecto.
Formigones es una localidad española perteneciente al municipio de Santa María de Ordás, en la provincia de León, comunidad autónoma de Castilla y León. Los clientes habían adquirido la vivienda, en la que los propietarios anteriores ya habían iniciado trabajos de reforma, que se encontraba totalmente vacía en su interior, se había arreglado exteriormente la cubierta, mantenido los muros de piedra originales, existiendo un forjado interior intermedio de madera y a la que se habían colocado las carpinterías de las ventanas. Los nuevos propietarios querían distribuir el espacio para crear una casa de vacaciones, con diferentes espacios de relación para la familia y amigos que pasan temporadas con ellos. La casa se distribuye por zonas, con diferentes espacios: de estar y relación, dormitorios, zona de cocina y comedor.
Existen dos zonas centrales de estar en cada una de las plantas, cinco dormitorios distribuidos de la siguiente manera: uno en planta baja, con vestidor y baño privado, tres dormitorios en planta primera, que comparten un baño y un dormitorio principal con vestidor y baño privado. La cocina se sitúa junto al acceso y está proyectada como otra zona de relación dentro de la vivienda con una isla central y una zona de comedor. La reforma se planteó como una intervención de mínimos, respetando los cerramientos exteriores e interviniendo con el menor número posible de divisiones para tener espacios muy diáfanos. Se utilizaron un reducido número de materiales para los revestimientos para conseguir una gran uniformidad de los espacios potenciando la sensación de zona continua entre las diferentes estancias.
La puerta de acceso se realizó en acero, con un gran marco perimetral que funciona como un porche para resguardarse de la lluvia, revistiéndose en el interior con la madera utilizada en la totalidad de la vivienda.
En planta baja los suelos son de gres en color oscuro, los techos en madera de pino y parte de las paredes están forradas con panel de madera de abedul, al igual que las puertas y los muebles que se realizaron en cocina y zonas de estar.
En la planta primera se optó por un pavimento laminado en color claro, los falsos techos existentes fueron demolidos y sustituidos por un falso techo con la inclinación de la cubierta que dejaba al descubierto la estructura de madera que se pintó en negro. Se realizaron diferentes partes del mobiliario con el mismo material en tablero de abedul, en baños y dormitorio de los niños con una estructura de dos camas en litera y armario. Los baños se alicataron con baldosa 10x10 en blanco en las zonas en contacto con agua, se dejaron las paredes en piedra y se utilizó el revestimiento de madera en las zonas del lavabo.
Se utilizaron un reducido número de materiales para los revestimientos para conseguir uniformidad