ESE RINCÓN ESPECIAL
Es el momento de disfrutar el exterior de la casa, de dejar que el jardín dialogue con el resto de las piezas para entenderse y formar un espacio habitable sereno, agradable y funcional. Estos meses son los propicios para dar sentido al comedor exterior, para disfrutar de una buena lectura a la sombra, para improvisar una cena con la familia y los amigos o contemplar la luna en todo su esplendor.
Por eso siempre hemos defendido que la decoración del espacio exterior es tan esencial como la del interior y no se puede improvisar con cuatro muebles para salir del paso. Esos metros cuadrados que convierten la casa en algo especial, que amplían y mejoran la vida cotidiana, precisan de un cuidado específico, de sillones con tejidos impermeables, estructuras resistentes y luminarias capaces de extender el día a la noche. Si la elección de muebles y complementos es correcta, no sólo disfrutaremos del jardín durante la época estival, sino que extenderemos su influencia benéfica todo el año y lo convertiremos en ese rincón especial con el que soñamos.