Materiales recuperados
La casa se encuentra rodeada de naturaleza, en un lugar tranquilo pero cercano a la ciudad de Vic. Sandra Soler realiza la reforma de esta vivienda, cuyo encanto se basa en la recuperación del techo de madera y de las paredes de piedra, tanto en el interior como en el exterior.
Por lo que respecta a la distribución, la vivienda se ha organizado a dos niveles integrados por estancias abiertas y dinámicas. Las dependencias comunes, ubicadas en la planta baja, comparten una única superficie diáfana y muy amplia que facilita la convivencia y se abre al porche.
Para las puertas de la entrada de la masía se adaptaron unas puertas adquiridas en un anticuario del Empordà. El vestíbulo de entrada está cerrado con una cristalera enmarcada en hierro lacado negro. Una consola en mármol negro y un espejo circular dan mucho carácter a este espacio.
El vestíbulo de entrada está cerrado con una cristalera enmarcada en hierro
La madera de roble da cuerpo a la mayoría del mobiliario
La cocina está compuesta por una gran isla
La zona del salón gira en torno a la acogedora chimenea de Pou, recubierta en piedra. El sofá es el modelo Linen con un tapizado de hilo de color crudo al igual que las cortinas seleccionadas en Panadés. La mesa del comedor es recuperada y de roble natural, encima una composición de las lámparas Cirio de Santa & Cole iluminan este espacio. Los sillones son el modelo Girona, tapizados en cuero.
La cocina está compuesta por una gran isla modelo B3 de Bulthaup Gallery, ganadora del premio “Bulthaup 2019 / la cocina como espacio Vital “. Ésta se ha iluminado con los perfiles suspendidos de Modular y en el lavadero se ha colocado el modelo B1 de Bulthaup
La vivienda se ha organizado a dos niveles, integrados por estancias abiertas y dinámicas
La mesa del comedor es recuperada y de roble natural
El salón gira en torno a una acogedora chimenea
En la segunda planta se ubican los dormitorios con sus cuartos de baño
Para aportar una nota de luz y color a los ambientes, se escogieron tejidos en tonos crudos
Los lavabos son de mármol Macael como el revestimiento del suelo y paredes de la ducha
El baño de esta planta se ha combinado con una pared de piedra y el resto de las paredes se han recubierto con microcemento. El lavabo es de piedra de Salvotori y la grifería de Fantini.
Para la mesa del despacho se optó por un sabor más rural con un tablero macizo de roble, lámpara de Anglepoise y la silla Bernarda lacada en negro.
Los dormitorios, con sus cuartos de baño, se han ubicado en la segunda planta donde se abren a la escalera central de piedras con unas vistas espectaculares de los exteriores de la finca.
El vestidor de la suite es de Poliform al igual que el resto de mobiliario. El mueble de baño está diseñado por la interiorista Sandra Soler y realizado por Carpintería Molas. Los lavabos son de mármol Macael como el revestimiento del suelo y paredes de la ducha y la bañera de Duravit.
El estilo tradicional de la masía se completa con una decoración sencilla, acorde con el pavimiento de parqué y las vigas y travesaños del techo. La madera de roble da cuerpo a la mayoría del mobiliario y puertas de esta planta.
Para aportar una nota de luz y color a los ambientes, se escogieron tejidos en tonos crudos que intensifican el aire bucólico y romántico que la interiorista ha buscado imprimir en toda la casa. La iluminación del resto casa es de Brick, Good Night, y Catellani Smith. En la primera planta hay una sala diáfana con una gran mesa y con un banco de obra recuperado que comunica con la zona exterior de barbacoa con una chimenea tradicional catalana.
Piedra y microcemento recubren las paredes del baño de esta planta