VÍCTIMA DE LA MODA
ESTABA CANTADO: A LA RAPERA BRITÁNICA M.I.A. NO LE SIENTA BIEN LA OLEADA DE £PRESUNTO¤ ACTIVISMO QUE ARRASA ENTRE MÚSICOS Y ARTISTAS. ASÍ LO HACE SABER ANTE EL ESTRENO DE SU DOCUMENTAL BIOGRÁFICO, QUE YA SUENA PARA LA INMINENTE TEMPORADA DE PREMIOS CINEMA
Agente provocador del pop del siglo XXI, Mathangi ‘Maya’ Arulpragasam (Londres, 1975) está de vuelta. La cantante, productora y activista más conocida por el acrónimo de M.I.A. (pronúnciese del tirón) llevaba tiempo sin decir esta boca es mía, al menos artísticamente. Su discurso sociopolítico, eso sí, no ha parado de incendiar titulares y redes sociales desde su asalto al estrellato global, en 2004. Y su estilosa imagen sigue siendo pasto de la moda. Ahora mismo, por ejemplo, es la obsesión de Riccardo Tisci en Burberry, tanto que el diseñador la ha convertido en una de las protagonistas de la campaña de la firma para estas Navidades. El spot publicitario la presenta relajada en un café y hogareña sentada a una festiva mesa... Pero la sensación de que puede estallar en cualquier momento resulta inevitable. De lo contrario no sería M.I.A.
La prueba, también audiovisual, es MATANGI / MAYA / M.I.A., el documental biográfico que la h a devuelto a primera plana. Un proyecto que comenzó a gestarse hace cinco años y al que le ha costado ver la luz, hasta el punto de que su director, Steve Loveridge, llegó a tirar la toalla en un momento dado. Compañero de clase en Central Saint Martins, ha tenido la ardua misión de editar y convertir en una narración coherente las más de 700 horas de vídeos domésticos, con toda clase de confesiones y secretos de backstage, que la cantante/rapera le fue entregando desde 2011. El resumen de 22 años de azarosa vida. «Te aviso que tengo resaca. Anoche necesité unos tragos después de ver la película», espeta la interesada nada más acomodarse para la entrevista tras el estreno. «No he tenido tiempo de digerirla», se excusa.