ÉXITO EN SERIE
CON UN EMMY BAJO EL BRAZO Y EL IMPULSO DE LAS PLATAFORMAS DE STREAMING, LA FICCIÓN ESPAÑOLA VIVE SU MEJOR MOMENTO FUERA DE NUESTRAS FRONTERAS. AHORA, LAS NUEVAS PRODUCCIONES LLEGAN CON GANAS DE MÁS.
Diecinueve de noviembre de 2018. Por primera vez, una serie española ganaba el Emmy a mejor drama internacional. Un punto de inflexión que marcaba una fecha para el recuerdo, pero que también confirmaba lo que ya hacía tiempo que se intuía: la ficción española pasa por uno de sus mejores momentos. Dentro y, sobre todo, fuera de España. «Siempre ha habido series que han triunfado en el extranjero», dice Álex Pina, productor ejecutivo de la galardonada La casa de papel y de El embarcadero, la nueva serie que este mes estrena Movistar+ y que resultó una de las triunfadoras del festival de contenidos MIPCON. «Sin embargo, la incursión de las plataformas de streaming ha traído consigo una nueva forma de consumo», continúa. Porque, si bien el reconocimiento internacional no es nuevo, a nadie se le escapa que nombres como HBO o Netflix tienen buena parte de culpa en la fiebre de los últimos tiempos.
«Estas nuevas plataformas necesitan contenido y llegar a los mercados locales. Puedes tener grandes éxitos mundiales, pero tu catálogo necesita variedad y series que sean muy de cada país», explica la directora de ficción de Atresmedia, Sonia Martínez, que fue testigo de cómo La casa de papel bordeó el fracaso en la televisión en abierto para convertirse después en la serie de habla no inglesa más vista de Netflix. Pero su caso no es el único. Otro de los ùltimos hits televisivos, Fariña, también ha visto cómo sus protagonistas han triunfado fuera bajo el título Cocaine Coast. «Lo que ha cambiado es el modo en que la ficción audiovisual bebe de la realidad», cuenta Nacho Carretero, autor del libro que da nombre a la serie. El escritor vivió en primera persona cómo su ensayo periodístico terminaba convertido en un fenómeno de masas. «La clave está en los personajes y la contextualización, que ha mejorado mucho», sentencia. Y algo se debe estar haciendo
bien, porque según un estudio de Deloitte, España es el cuarto país que más formatos televisivos exporta.
No en vano, HBO ya ha anunciado el estreno de la adaptación audiovisual de la novela de Fernando Aramburu, Patria, para 2020; y Netflix acumula dos producciones nacionales propias que han trascendido fronteras: Las chicas del cable (con una cuarta temporada ya confirmada) y, más recientemente, Élite, cuyo caso es especialmente reseñable ya que desde el principio nació con vocación global. «El siguiente Stranger Things o Por 13 razones puede venir de cualquier s itio. Y va a venir de España...», decía Erik Barmack, vicepresidente de contenidos originales internacionales de Netflix, el pasado mes de octubre, justo antes del estreno del drama juvenil. Semanas después, Élite ocupaba el primer puesto en los rankings de visualizaciones internacionales de la plataforma. Y Carretero lo tiene muy claro: «Hoy, toda la ficción de Europa está mirando a España»