La fundación Unoentrecienmil y su lucha sin tregua contra la leucemia infantil.
EL OBJETIVO DE JOSÉ CARNERO, AL FRENTE DE LA FUNDACIÓN UNOENTRECIENMIL, ES RECAUDAR FONDOS PARA LA INVESTIGACIÓN MÉDICA E IMPULSAR ASÍ QUE LA LEUCEMIA INFANTIL TENGA CURACIÓN PLENA.
Hablar de la leucemia de su hijo nunca fue algo difícil para José Carnero. «Fundé el blog Unoentrecienmil el mismo día en el que nos dieron el diagnóstico. Quería contar nuestro día a día en positivo y alejar el fantasma del ‘pobrecitos’ de nuestro alrededor», explica él, que por entonces era conocido por haber fundado la agen
cia de publicidad Kitchen. Hoy, casi nueve años después de aquel momento, vive volcado en la fundación Unoentrecienmil, que surgió como evolución natural del blog y ya ha recaudado más de un millón de euros, que se destinan íntegramente a la investigación contra la leucemia infantil (que supone entre el 1 y el 3% de todos los cánceres que afectan a niños). Este año esperan obtener medio millón más. «Estamos reuniéndonos con nuestro comité clínico para analizar cómo y de qué manera invertir este dinero en investigación y necesidades reales que no estén siendo atendidas», afirma. A pesar de que su hijo, Guzmán, hace años que está totalmente recuperado, José no tiene ninguna intención de
dejar de luchar. Tampoco su compañero al frente de la fundación, Eduardo Schell, que pasó por lo mismo que él, lanzando el portal Médula Para Mateo con el mismo objetivo. Hoy trabajan unidos. «Nuestro propósito es impulsar la curación plena de la leucemia infantil. Dos de cada diez niños diagnosticados aún continúan sin salir adelante. No son simples números; son niños, hijos de amigos, de familiares... No vamos a parar hasta que algún día escuchemos a un doctor diciéndole a un padre: ‘Tranquilo, solo es leucemia’. Como si simplemente fuese un resfriado», asegura.
Para lograrlo, la fundación Unoentrecienmil ha creado una beca anual de 100.000 euros para investigación, otorgada a través de la ANEP (Agencia Nacional de Evaluación y Prospectiva), que selecciona de forma objetiva e independiente el mejor proyecto entre los presentados. También ha promovido campañas como La Vuelta al Cole o Proyecto Corre, que ha derivado en la beca Mujeres que Corren, con la que financian proyectos de investigación relacionados con el impacto del deporte en los niños en tratamiento oncológico. Una de sus acciones más sonadas fue el documental que rodaron junto a Penélope Cruz en 2016. «Nos sentamos con ella para proponerle una colaboración. Queríamos rodar un documental que contase todo lo que hay detrás de estas historias, el viaje vital de nuestras familias. Y lo que recibimos no fue simplemente un sí, fue una implicación, una generosidad y un corazón que nos llenó de alegría. Aún hoy me emociona cuando uno de los niños o sus familiares me dicen que se siguen escribiendo a través de WhatsApp con ella. Estas situaciones crean lazos muy fuertes», cuenta José. La vida, después, tampoco vuelve a ser la misma para nadie. «Hoy disfruto del presente, del regalo que es volver a casa y ver a Eva, mi compañera de viaje, pareja y amor de mi vida, y a nuestros hijos, Marina, Guzmán y Julia, de apenas un año. Puedo vivir cada momento, y nada de esto sería así si no hubiese tenido que vivir la enfermedad de Guzmán. Nos enseñó a apreciar el regalo que es la vida y a darnos cuenta de que lo único que tenemos con certeza es el presente. No podemos dejar pasar la oportunidad de disfrutarlo», cuenta. Lección aprendida �