PÁGINAS PARA CRECER
Hablar de Fran Lebowitz es hacerlo de la Gran Manzana, a la que la autora se mudó con 18 años. Décadas después, su prosa se reúne en Un día cualquiera en Nueva York (Tusquets). Mientras, Javier Giner revela en Yo, adicto (Paidós) el infierno de las adicciones y María Fernández-Miranda explora la nostalgia (emocional y olfativa) en El verano que volvimos a Alegranza (Plaza & Janés).