¡CUIDADO CON LOS ATRACONES!
La moderación es la clave para evitar comilonas que bajan la energía y la moral, ya que aunque se prepare un menú sano y balanceado, el exceso puede provocar indigestión, pesadez y mal humor. Comer con frugalidad consiste en ingerir variedad de alimentos (mejor no procesados), en cantidades moderadas, haciendo al menos 3 comidas al día, 2 tentempiés, beber 8 vasos de agua mineral al día, y tomar también un suplemento vitamínico y mineral. Llegar a ser moderado es un proceso gradual que debe desarrollarse con alegría, ya que sin verdadero regocijo no se puede conseguir bienestar. Y cuando te ‘pases’ con la comida, no te frustres. Sigue intentándolo con ilusión.