El Pais (Uruguay) - El empresario
Los desechos de cultivos y madera reviven como ladrillos ecológicos
NUEVOS MATERIALES BUSCAN MITIGAR EMISIONES DE CO2
Desde hace años, la industria de la construcción, una de las más contaminantes del mundo, se encuentra en constantes intentos por encontrar opciones más sustentables. En ese marco, el cemento se presenta como el elemento que más perjudica al medio ambiente.
En medio de la creciente preocupación por el impacto ambiental de la construcción, la demanda busca alternativas al hormigón, un material cuyo proceso de producción contribuye en un 8% a las emisiones de dióxido de carbono. Por esa razón, diversos países experimentan con nuevas mezclas que puedan sustituir a este material, pero que también abaratan los costos, ya que utilizan residuos de otras industrias.
En este caso, el material elegido por arquitectos de la Universidad del Este de Londres (UEL), la empresa británica Tate & Lyle Sugars y la firma de arquitectura Grimshaw fueron los residuos del cultivo de caña de azúcar, considerado el mayor del mundo por su cantidad de producción (2.000 millones de toneladas al año). Los especialistas trabajan desde 2020 con el bagazo, un sobrante de los tallos de las plantas, con la idea de poder sustituir por completo el hormigón o el ladrillo de arcilla: así nació Sugarcrete.
El resultado de la mezcla, que tiene un gran porcentaje de bagazo, se puede usar para crear paneles aislantes, bloques ligeros, de carga y losas estructurales para pisos y techos. Como consecuencia se crea un material de construcción que es más barato, mas liviano y sustentable que el utilizado actualmente: su elaboración implica unas emisiones de carbono 20 veces inferiores a las del hormigón, es cinco veces más ligero y su producción es mucho más económica.
Los ladrillos de Sugarcrete fueron sometidos a pruebas y ensayos para comprobar su resistencia al fuego, a la compresión, pero también se verificó su conductividad térmica y durabilidad.
CON AYUDA DE BACTERIAS
La firma neerlandesa StoneCycling, que se encarga de crear soluciones
(propiedad de Volkswagen) es una excepción a la regla.
GRANDES DIFERENCIAS
Para armar su plantel, el club de la Bayer invirtió esta temporada un total de € 81,8 millones (US$ 88,6 millones) en nuevos jugadores e ingresó € 69,2 millones (US$ 75 millones) por ventas. El saldo negativo por transferencias asciende
La mayoría del club está en manos de Bayer, que lo fundó en 1904