El Pais (Uruguay) - El empresario
Parkings acusan el golpe del aumento de la zona tarifada
LOS INGRESOS CAEN ENTRE 15% Y 50% POR LA MENOR DEMANDA DE ESPACIOS POR UNA HORA; MUCHOS ANALIZAN CAMBIAR LA ECUACIÓN DE SU NEGOCIO
Tuve que poner un cartel que indique que hay lugar. Eso un año atrás no existía. Por el contrario, debíamos colocar el cartel de ‘no hay lugar’». La reflexión es una de las tantas que hacen los responsables de algunos parkings ubicados entre el Centro y Ciudad Vieja, que vieron cómo su negocio mermó tras la ampliación de la zona de estacionamiento público tarifado. Según explicaron varios empresarios de ese rubro, desde que la Intendencia de Montevideo amplió unas 200 cuadras esa zona, los clientes que recurrían a los parkings por una o dos horas comenzaron a encontrar espacio afuera y eso repercutió en una caída del negocio.
Si bien este escenario no pegó a todos por igual, algunos parkings aseguraron que sus ingresos disminuyeron entre 20% y 50%, con valores de la hora que oscilan entre $ 70 y $ 130 según los casos relevados por El Empresario.
Como contracara, el impacto del aumento de la zona de estacionamiento tarifado puede verse reflejado en las arcas de la Intendencia de Montevideo. De acuerdo a datos aportados a El Empresario por la comuna, tras haber implementado las nuevas zonas la facturación creció cerca de un 15% de un mes a otro. En octubre recaudó $ 11,3 millones, cuando en septiembre habían sido $ 9,8 millones.
El crecimiento se aprecia también al comparar números con el año pasado, cuando la facturación de septiembre fue de $ 9,5 millones y la de octubre, $ 9,7 millones. Además del aumento del valor de la hora, uno de los factores que más incidió fue precisamente el incremento de ventas de tickets en las franjas de una hora y dos horas (fueron cerca de 60.000 más) junto a la incorporación de los fraccionamientos de media hora (ver detalle en recuadro).
«La verdad se nota, impactó, no entra nadie. Está afectando sobre todo a los usuariospor hora, que son nuestros principa- les clientes. Esos ahora encuentran lugar y dejan el auto en la calle. En nuestro caso, bajó más de un 50% el negocio. Antes entraban 40 autos por día y hacíamos unos $ 6.000, ahora entran menos de la mitad», afirmó Carlos Delgado, del Parking Charbel (Eduardo Acevedo y Mercedes).
También a la mitad le bajó el negocio al Parking Libertad, ubicado en Soriano y Ejido, con capacidad para 18 autos. «La gente lo deja afuera y otras personas ya ni vienen en auto. Y la mayoría de nuestro negocio viene por el de la hora», dijo por su parte Matías Modernel, empleado del lugar.
Similar impacto se nota en la zona de Colonia y Vázquez. Ahí está el Parking Colonia, donde si bien ya se sentía una baja de la actividad hace un año, notó que se acentuó con la nueva área de estacionamiento. En su caso no tiene medido cuánto impactó, pero sí se vio obligado a congelar los precios. «Estamos aguantando con el precio porque el que paga zona tarifada encuentra lugar y lo deja ahí», aseguró Julio Garat, del establecimiento.
Con capacidad para 120 vehículos, en el Parking Río Branco el negocio del vehículo que entraba por hora bajó un 40% desde que se amplió la zona de tarifado, afirmó Pedro Costa.
«Nosotros teníamos un promedio de 80 autos, y ahora estamos en 40 por hora o media hora». Para paliar esa merma, Costa dijo que está apostando a incrementar el cliente mensual y apostar por aumentar los convenios con empresas y hoteles de la zona. «Esto salva algo el negocio. Ahora lo que más se factura es mensual; muchos son empleados de la vuelta que llegan de lunes a viernes en horario de oficina. Con esto se ha llenado el parking; el negocio se mantiene porque hemos tomado más mensuales», aseguró.
Julio Naupp, responsable de Colonia Parking, aseguró que bajó el trabajo pero no supo atribuirlo a «esto o la situación (económica) general».
Su parking tiene capacidad para 120 autos y su negocio se reparte en partes iguales entre los clientes mensuales y los del día a día. «Tengo unos 90 autos que pagan el fijo mensual entre los de la noche y los del día, y 24 horas. Y entiendo que si baja el del día impacta, porque si alguien viene seis horas durante 10 días, es lo mismo que un mensual diurno». En su caso, esa baja del negocio lo equilibra con convenios que tiene con empresas de la zona.
EXPECTATIVA Y REALIDAD
En la Ciudad Vieja es donde más se siente la baja de la actividad tras el aumento del área de es-
tacionamiento tarifado, pero hay dos realidades diferentes. Los parkings ubicados en la «periferia» no sienten tanto el golpe porque se mueven más por clientes mensuales y trabajan las 24 horas.
En cambio, se siente más en los estacionamientos del corazón del barrio, aseguró Diego Gutiérrez, del parking de la Catedral, en la calle Rincón entre Treinta y Tres e Ituzaingó (con cupo para 260 autos). «Nosotros hace tiempo que venimos en baja y luego de esto cayó un 20% el negocio. Es que abrimos de lunes a viernes en horario de oficina, por lo que trabajamos diferente a parkings que están en los bordes y abren las 24 horas».
González reconoció que al momento del anuncio de la ampliación se creó una expectativa de crecimiento.
«Al inicio tuvimos muchas consultas, pero no concretaron. Antes no había lugar en el Centro o Ciudad Vieja y ahora hay espacio. Además, al tener la posibilidad de la media hora en la calle también la gente opta por eso», señaló González. Por ello, en su caso también están evaluando si conviene captar más clientes mensuales. «Estamos viendo si es algo pasajero y de plantear alguna estrategia entre la actual y pasar las plazas destinadas a (alquileres) diarios a clientes mensuales», dijo.
Otra realidad vive el Parking Uno, ubicado en la Ciudad Vieja sobre 25 de Mayo casi Lindolfo Cuestas. «No afectó porque nuestro negocio es más mensual, siempre son los mismos clientes, principalmente del hospital Maciel. El cliente por hora es 25% del total», dijo.
Jorge Zubillaga, administrador de cinco parkings —tres fuera de la zona afectada, uno en Ciudad Vieja y otro en el centro—, reconoció que su negocio se resintió.
«Bajó el negocio entre la combinación mensual y el que va por hora y para nosotros es más negocio el de la hora. En donde más impactó fue en el de la Ciudad Vieja (Parking Cerrito 510), en la esquina de Cerrito y Treinta y Tres, donde la facturación bajó entre un 15% y un 20%, principalmente por el cliente que entra por hora.
En tanto, en Parking Andes, sobre la calle Andes entre 18 de Julio y San José, si bien se siente el impacto hay días que se llena, relativizó. «En este lugar también ayuda que tenemos convenios con empresas de la zona», agregó Zubillaga.
Así, mientras el usuario todavía se acomoda a las nuevas zonas de estacionamiento tarifado, los parkings reacomodan sus espacios y apelan a desarrollar nuevas estrategias para que el negocio no se frene. El tiempo dirá.