El Pais (Uruguay) - Revista domingo
“Si me contratás, no te vas a arrepentir”, dijo a director
“En mi reunión de dos minutos, le dije a John Huston, que iba a dirigir Reflejos en tus ojos dorados:
‘Jamás he actuado frente a una cámara pero, si me contratás, no te arrepentirás’”, recordó Forster. “Huston dijo: ‘Te daré algunas instrucciones, Bobby. Después te llamamos’”.
“Pensé que era una forma de decirme que no me habían aceptado, pero dos horas más tarde llegaron a un acuerdo. Pasaron meses antes de que comenzáramos a filmar. Montgomery Clift murió y tuvieron que remplazarlo con Marlon Brando”, continuó.
Mientras Forster estaba esperando, pudo leer el guion e hizo un descubrimiento interesante: su personaje, un soldado del Ejército, tenía la costumbre de cabalgar desnudo en el bosque. “Me pregunto cómo lo harán”, se dijo a sí mismo. “Quizá harán trucos con las tomas”. Resultó que no harían ningún truco.
“Bob, ¿cómo podrás hacer algo así?”, se preguntó. Después se dijo: “Si tenés hacerlo, quizá debas renunciar ahora mismo. Dejá de preocuparte por eso”.
“Lo siguiente que supe fue que el departamento de vestuario me dio una pequeña V y una cinta color piel. Me lo entregaron para que yo averiguara cómo ponérmelo”, comentó Forster.
“Recuerdo haber salido y haber montado el caballo. Paseamos con él algunas veces y la cosa esa se desprendió, y yo simplemente la arrojé a los arbustos”.