El Pais (Uruguay) - Revista domingo
Marcha hacia Paraguay
tumbra a recorrer a caballo 500 kilómetros entre Montevideo y la Meseta de Artigas (Paysandú) o hacia la celebración de la Patria Gaucha (Tacuarembó). “Acá vamos a hacer la más larga, más o menos el doble en kilómetros”, precisa. Y suma: “Para todos los que amamos el tradicionalismo esto es algo muy emocionante y lo hacemos en honor a nuestro prócer”.
Dice Ávalos que por conocer la ruta hacia Paraguay es quien ha ido ordenando algunas cuestiones logísticas para su grupo como las paradas o los preparativos para soportar las temperaturas. Por ejemplo, al cierre de esta nota, la máxima para Montevideo era de 19 grados; para Curuzú Cuatía (al sur de la provincia de Corrientes) era de 32 grados y para su destino final, Asunción, era de 38 grados. Afortunadamente, ningún grupo ha sufrido percances —salvo alguna lluvia o una nube de moscas molestas en Campo General Ávalos (Corrientes) o mosquitos aun más molestos—.
Las dos marchas han completado aproximadamente un cuarto del recorrido fuera de fronteras en la primera semana. Aunque tuvieron inicios diferentes. Uno de los grupos, el de 20 jinetes asociados a aparcerías de la zona sur del país, arrancó en la Plaza Independencia de Montevideo el viernes 15 de marzo y comenzó su camino hacia Salto recogiendo los chasques (ya hablaremos de eso) de distintas escuelas públicas.
El otro, que comprende 10 jinetes —dos de ellos, blandengues— se concentró en Salto el lunes 25. Este tenía previsto cruzar el Puente Internacional Salto Grande al día siguiente pero tuvieron que esperar hasta el miércoles hasta obtener el permiso de la autoridad sanitaria argentina. Los jinetes de la otra marcha cruzaron al país vecino el pasado fin de semana.
SE COMPLETAN ENTRE 30 Y 35 KILÓMETROS POR DÍA; ESTIMAN LLEGAR EL 25 O 26 DE ABRIL.
Todos prevén llegar a la Escuela Artigas en Asunción entre el 25 y el 26 de abril, pocos días antes del acto protocolar por los 100 años (ver recuadro).
La ruta que se sigue, como dice Saracho, son las “huellas” de José Gervasio Artigas. En el mapa están marcados los pasos por Ayuí, Federación, Chajarí, General Ávalos y Curuzú Cutía, luego se toma el rumbo hacia Reconquista y Resistencia y aquí se abren dos opciones: o se dirigen hacia Posadas —como última ciudad argentina— para cruzar el río Paraná hacia Encarnación tal como lo hizo Artigas, para luego subir hasta Asunción (una vía más larga) o se toma la ruta hacia Formosa y Clorinda —como última ciudad argentina— para tomar el cruce fronterizo Pasarela de la Fraternidad que deja a un poco más de 20 kilómetros de la capital paraguaya. La marcha que partió desde Salto tomará el segundo camino y el tramo entre Encarnación y Asunción —casi 400 kilómetros— lo harán acompañados por jinetes paraguayos.
Cada marcha avanza entre 30 y 35 kilómetros por día en dos tiempos: entre dos y tres horas en la mañana y lo mismo en la tarde. Se paran en lugares con buen pasto y preferentemente donde haya agua, así los caballos (y los jinetes) pueden descansar. Cada grupo tiene camionetas de apoyo que viajan adelante para conseguir lugares donde puedan alojarse por la noche o armar las carpas y para comprar provisiones. Lo último
cuando es necesario, porque hay mucha solidaridad en el camino. Los jinetes ya fueron invitados con cordero, botellas de vino y agua bien fría en varios puntos y se les regaló alfalfa y avena para los caballos. Les han ofrecido alojamiento con aire acondicionado, reparaciones mecánicas y herrajes gratuitos.
Los caballos están entrenados para recorrer grandes distancias. Un grupo llevó 10 y el otro, 32. En ambos lados viajan caballos criollos y mestizos; en el equipo más numeroso también hay ejemplares cuarto de milla y árabes. José Carlos Arana, integrante de la marcha que salió desde Salto, cuenta a Domingo: “Algunos eran caballos de polo. Son atléticos. Están como salidos del primer día”.
Con ellos cabalgan dos caballos moros del Regimiento Blandengues de Artigas, la raza equina considerada autóctona y que era la que elegía el prócer para montar por su resistencia. Al igual que en un desfile militar, en esta marcha un blandengue tira de uno de ellos con su montura pero sin jinete, representando así al caballo de Artigas que está listo para acudir a su llamada (ver recuadro). El teniente Ignacio Graña lo explica: “Simboliza la
MÁS DE 50 ESCUELAS PARTICIPARON DEL CHASQUE; NIÑOS ESPERAN CONTACTO.
Un caballo listo para el llamado del prócer