El Pais (Uruguay) - Sabado Show
EL DIRECTOR DEL MIEDO
l jueves se estrenó la película antológica El ritual del libro rojo que dirige Ariel Luque. Se trata de tres incautos amigos que deciden jugar a “El Libro Rojo” sin saber que en la casa donde se encuentran hay un mal que espera ser liberado. De cómo fue hacer esta película y el gusto por el género terror habló Luque con Sábado Show.
Ariel Luque atiende el llamado de Sábado Show desde Los Angeles, donde se encuentra en conversaciones con productores para los distintos guiones que tiene para ser filmados.
—Sos uno de los guionistas y el director. ¿Cómo surge el proyecto de esta película?
—Venía haciendo cortometrajes y se pusieron en contacto conmigo de la productora Black Mandala y me propusieron el proyecto. Nico (Onetti) tenía ganas de hacer algo con un juego porque había funcionado bien El juego de las cien velas, me propuso este proyecto, empecé a investigar y escribí el guion. Así estuve varias semanas escribiendo el guion.
—Como en esa película que mencionas, hay varios directores. ¿Eso se debe a que es una película antológica compuesta por distintos cortos?
—Exacto. Nico quería que fuera una antología, porque vienen trabajando con ese formato, pero yo quería que lo principal fuera la historia núcleo y que no se cuenten de manera azarosa las otras historias como si fueran cuentos. Entonces lo que hice desde el guion fue sumar estas historias a la idea núcleo. Entonces un corto es la historia de la bruja, otro es el de la protagonista, y todo tiene que ver con ellos.
—¿Qué te interesa del terror?
—Las historias de terror que me
MARCA DEL TERROR
Gracias a títulos como El juego de las cien velas o La forma del bosque ,la productora Black Mandala se hizo un nombre en el terror gracias a sus historias antológicas de sustos.
me lo propuso Nico no dudé en hacerla. Me fue tirando ideas, me pasó un montón de cortometrajes y se fue generando este proyecto del que estoy muy orgulloso por su resultado.
—¿Cómo fue tener un elenco argentino y una película en inglés?
—Hicimos un casting bastante largo donde buscábamos buenas actuaciones y también pronunciaciones. Fue difícil encontrar el inglés bien hablado y pronunciado.
—¿Cómo fue compaginar esos cortos?
—Los cortometrajes ya habían sido filmados, algunos fueron parte de festivales, y los elegimos pensando en cómo entraban en la película.Así se fue gestando la historia. Desde mi punto de vista querían que fueran artísticos pero también comerciales, que no sean solo comerciales. Quería que hubiera una buena factura estética, un lindo arte, vestuario y creo que lo logramos muy bien.