CHUY LA PAZ INQUIETA
Ferreira y otros 350 vecinos salieron a la calle para pedir más seguridad. Antes fueron la alcaldesa del Chuy, Mary Urse, y el prefecto Barbosa quienes reclamaron una reacción de las autoridades. Urse, que es frenteamplista, acusó al ministro Eduardo Bonomi de ignorar tanto desmadre. Pero, para que desembarcara la Guardia Republicana de un lado y el Pelotón de Operaciones Especiales del otro, hicieron falta ocho muertos más.
Uno de esos muertos, del lado brasileño, fue Emmerson Cunha Lima, apodado Pelé por su habilidad para jugar al fútbol. Pelé era uno de los líderes de la banda brasileña y lo habría asesinado su exsocio frontera del Chuy en los últimos 16 meses. Además, hubo siete intentos de homicidio. La gran mayoría —17— ocurrió del lado brasileño. Solo seis están resueltos.
uruguayo. Las otras bandas locales se unieron a una u otra facción. Una vez muerto, su viuda y su yerno fueron atacados. Sobrevivieron, y la familia entera se fue de la ciudad. También del lado brasileño, al día siguiente de estos enfrentamientos, un hombre de San José apareció muerto en una iglesia evangelista que fue incendiada. Fue la gota que colmó el vaso. Un par de días después llegaron los refuerzos y empezó la paz.
En la calle se dice que lo peor ya pasó y se cruzan los dedos para que los refuerzos no se vayan. Aunque los brasileños ya no están, la Guardia Republicana permanece. Nadie sabe hasta cuándo y se teme que, sin ella, el Chuy vuelva a ser vulnerable. Urse opina que la Policía está trabajando “mejor que antes”. El periodista local Diego Landache dice que “se palpa en el ambiente un mayor trabajo de investigación”, y el edil Mario Sasias cree que el Chuy “ha vuelto a ser la frontera que era”: con delitos, con violencia, pero “sin sicarios y ajusticiamientos”.
Sin embargo, los investigadores brasileños ya habían advertido a El Observador que sin procesamientos esta podría ser apenas una paz armada. Tras un mes sin localizar al cabecilla que ordenó la muerte de Pelé, ni a los dos sicarios, su advertencia es aun más seria y ahora auguran que “habrá más muertes”.
Richar Ferreira, presidente de la Asociación de Policías de Rocha, asegura que cinco
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número incluye a los que no trabajan reprimiendo. Los que realizan patrullaje son dos por turno. La Asociación de Policías de Rocha pide más personal.
investigadores del Chuy fueron amenazados por un narcotraficante requerido en Brasil; entre ellos está el oficial a cargo del área de investigación y narcóticos. Consultado, el Jefe de Policía de Rocha, Claudio Pereyra, se negó a hacer apreciaciones respecto a “policías que estén o no amenazados”, pero admitió que las amenazas “perjudican indudablemente” la investigación.
QUE SÍ, QUE NO. Bajó el delito, pero no todos están conformes con la Guardia Republicana. Guillermo Rodríguez, presidente de la asociación que reúne a los comerciantes ambulantes del Chuy, dice que son muchos los que están deseando que se vaya porque el problema de raíz no
GGG