Gustavo Petro, la izquierda que asuma como alternativa
El exalcalde de Bogotá que militó en un grupo guerrillero se transformó en los últimos meses en un ídolo de multitudes que lucha por ser el primer presidente izquierdista de Colombia.
El economista de 58 años, candidato de Coalición Colombia Humana, ocupa el segundo lugar en las encuestas de opinión detrás de Iván Duque.
Sus propuestas de cambiar el modelo económico subiendo los impuestos a los dueños de grandes extensiones de tierras improductivas y de alejarse de la dependencia económica del petróleo y del carbón para dar paso a energías limpias, entusiasman a muchos peor asustan a inversores y empresarios.
Sus adversarios políticos aseguran que más allá de combatir la pobreza y la desigualdad social, busca llevar a Colombia por la ruta de Venezuela.
La elección de Petro en 2011 como alcalde de Bogotá, el segundo cargo más importante de Colombia después de la presidencia, se vio como una prueba de que la política era el camino a seguir por movimientos guerrilleros como las FARC. En 2010 ocupó el cuarto lugar en la elección presidencial con 1,3 millones de votos, menos de la mitad de los que obtuvo en la consulta de marzo, en la que ganó su candidatura.
Petro promete que la cuarta economía de América Latina será inclusiva, con un sistema de banca pública que garantice crédito a bajo costo a pequeños y medianos empresarios, además de un sistema gratuito y universal de acceso a la educación terciaria.