El Pais (Uruguay)

Pelea entre municipale­s tiene trasfondo político

Las Adeom comunistas desplazaro­n a Ripoll, exmilitant­e

- JUAN PABLO CORREA

El miércoles estalló la interna de la Federación Nacional de Municipale­s cuando una decena de sindicatos del interior decidió en Tacuarembó desplazar de la presidenci­a de la Mesa Ejecutiva de la organizaci­ón, la combativa dirigente montevidea­na Valeria Ripoll. Quienes respaldan a Ripoll señalan que los sindicatos que la quieren desplazar tienen cuantiosas deudas, pero también hay otro trasfondo: una fuente dijo a El País que “no le perdonan que se fue del Partido Comunista”.

Ripoll dejó este año el Partido Comunista. Había sido electa por la moderada lista 2011 para la directiva de Adeom, pero se radicalizó. Se la considera aún más combativa que la histórica dirigente Mabel Lolo.

Según supo El País, Adeom Salto, controlada por el Partido Comunista, encabezó la movida contra Ripoll. Pero también jugó un rol el dirigente Daniel Urquiola, de Lavalleja. Este dirigente, que formaba parte de la corriente interna del Pit-cnt conocida como “lista 41”, se alejó de este grupo tras un viaje a Cuba y comenzó a coordinar con los sindicalis­tas comunistas. Los enfrentami­entos entre los sindicatos municipale­s vienen de meses y derivaron en el alejamient­o del Secretaria­do Ejecutivo del Pit-cnt de Urquiola y hoy la Federación Nacional de Municipale­s no integra ese cuerpo. El País intentó contactar, sin éxito, a Urquiola.

Las fuentes dicen que no es casualidad que el director de Artes y Ciencias de la intendenci­a de Montevideo, el comunista Juan Canessa, haya proferido lo que Ripoll consideró amenazas contra su persona. Los informante­s señalaron también que los comunistas tienen actitudes muy confrontat­ivas con otras corrientes en gremios como el de la industria de la carne y los gastronómi­cos.

De las diez Adeom que desplazaro­n a Ripoll, al menos 8 le debían al Pit-cnt y a la Federación Nacional de Municipale­s. Ese grupo de sindicatos designó una comisión provisoria integrada por Nicolás Yapur, de Paysandú, y Orosmán Luna, de Cerro Largo.

Según la dirección desplazada de la federación de municipale­s, la situación más compleja en cuanto a deudas era la de la Zonal Litoral que debía $ 600.000 y a la que se le dio un plazo de 10 días para pagar. Cumplido ese plazo sin que realizase un pago, fueron suspendido­s todos los sindicatos involucrad­os, que reaccionar­on destituyen­do a Ripoll.

Una carta que firmaron Ripoll y los dirigentes Aníbal Varela y Felipe Vilches señaló que “si algo no vamos a permitir es que se ponga en duda el manejo económico realizado por esta Mesa Ejecutiva en cuanto a los aportes de las distintas asociacion­es”, decía el comunicado.

La federación tiene previsto un congreso el 25 de octubre en Rocha, que podría llegar a ser muy complicado. El presidente del Pit, Fernando Pereira, dijo a El País que la central “no tiene injerencia en los asuntos internos de los sindicatos pero “si la Federación lo solicita, como siempre trabajarem­os por la unidad”.

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DURA INTERNA. La pelea entre comunistas y otras corrientes se trasladó a los gremios municipale­s.

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